El cuadro melillense jugó su peor encuentro de lo que llevamos de temporada y su rival no dio ningún tipo de facilidades. A los melillenses no les salió nada durante todo el choque.
El conjunto del CD Virgen de la Victoria no pudo sacar nada positivo de su enfrentamiento liguero de ayer donde midió sus fuerzas ante el líder del grupo F de la Primera División, el BM Los Dólmenes al caer por el claro 17-38, en un parido donde los melillenses se vieron desbordados desde el saque inicial.
El encuentro comenzó con un serio Antequera en defensa que intentó por todos los medios poner diferencias en el marcador desde el saque inicial y cuando se cumplió el minuto seis de partido ya ganaba por 1-3 ante un conjunto melillense que no terminaba de asentarse sobre la pista de juego del pabellón Lázaro Fernández.
Con el paso de los minutos, los jugadores dirigidos por Nacho Vico siguieron sin encontrar la regularidad de otros partidos para intentar al menos acercarse en el electrónico a su rival.
Los fallos en ataque hicieron inviable que los locales pudieron, ni tan siquiera acercarse a los antequeranos en el marcador llegándose al minuto 18 con un 4-9.
Pero los peores momentos se vivieron en los últimos compases del primer tiempo ya que los jugadores locales estuvieron más de diez minutos sin conseguir ni un sólo gol, lo que fue aprovechado por su rival para terminar de romper el partido a su favor y llevarse a la finalización del primer tiempo con el tanteador de 5-16.
Segunda parte
En este segundo periodo cuando todo parecía indicar que los visitantes bajarían su intensidad defensiva y la rapidez en sus ataque, ocurrió todo lo contrario ya que salieron muy enchufados y con el paso de los minutos las diferencias en el marcador fueron abismales, ya que el Virgen de la Victoria llegó incluso a ir perdiendo por más de 20 goles de diferencias. En los compases finales se entonaron un poco más y trataron por todos los medios de maquillar el resultado final para dejarlo en un 17-38. Ahora lo más importante es olvidar cuanto antes este partido y solamente centrarse en lo que será la próxima jornada de competición.