Melilla recordará esta campaña como la más sucia probablemente de nuestra actual etapa democrática. Lo vaticinamos antes de que empezara incluso la precampaña, porque se andaban mezclando todos los elementos necesarios para que así fuera.
No obstante, ha ido mucho más lejos de lo que esperábamos, con agresiones a candidatos y simpatizantes del Partido Popular, partido que tristemente se ha convertido en el pim pam pum del pretendidamente negado pero evidente bloque anti PP, formado por PSOE, CpM y PPL.
Han trascurrido tantos sucesos, hemos dependido incluso de la Justicia hasta el último momento para que se determinara quién podía ser candidato, que es difícil recordar un previo de elecciones tan tortuoso, conflictivo, repleto de sucesos deleznables para la salud democrática y la necesaria implicación de los ciudadanos en la imprescindible participación electoral.
Por ello, pedimos a los melillenses que sean consecuentes con la importancia de estas elecciones, que participen activamente en los designios de nuestro futuro y que no duden en acudir a las urnas para votar según su conciencia, sus preferencias y convencimiento por la opción que estimen más conveniente para la mejor defensa de los intereses de Melilla.
Hay que ser consecuentes con nuestro papel en esta Democracia y ejercer el derecho al voto. El domingo hablamos los ciudadanos y no podemos desaprovechar lo que no deja de ser una oportunidad histórica para decidir qué queremos colectivamente.