Once ONG marroquíes han pedido a las autoridades de Marruecos que cesen las operaciones "colectivas" de traslado de inmigrantes irregulares a la frontera, especialmente en el caso de los refugiados y solicitantes de asilo.
En un informe presentado ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU (CDH) hecho público este miércoles en Rabat, las organizaciones reclaman acabar con esta política que aplica Marruecos con algunos migrantes, a los que devuelven a lo largo de la línea fronteriza con Argelia.
El informe recomienda al Estado marroquí que respete sus compromisos de no llevar a refugiados o solicitantes de asilo a la frontera para expulsarlos del país, lo que viola, recuerda, la convención de Ginebra sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951.
Infringe asimismo, explica, una ley marroquí por la cual estas categorías de migrantes están exceptuadas de esta medida, junto a los menores y las mujeres embarazadas
El informe denuncia además las "dificultades" que sufren los emigrantes y refugiados en Marruecos para obtener y renovar los documentos de residencia en el país magrebí.
Las organizaciones lamentan que Marruecos no haya regularizado la situación de los refugiados y solicitantes de asilo que están en su suelo y reconocidos por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur)
Y añade que una parte importante de los que ya habían obtenido documentos de residencia en Marruecos, encuentran "dificultades" para renovarlos.
Además, reprochan que los logros conseguidos por los refugiados y migrantes son "frágiles" debido a la demora en la ratificación de los proyectos de ley sobre la emigración y el asilo, redactados hace cinco años.
El informe recomienda la redacción e una legislación que permita a los emigrantes participar en las elecciones locales, facilitar su acceso a los servicios sanitarios y establecer un plan para que estas personas se beneficien mejor de seguros de salud.
Casi un 40% de migrantes irregulares
Según una encuesta realizada en 2021 por el Alto Comisariado de Planificación (HCP), organismo público de estadísticas y censos, el 36,6 % de los migrantes que viven en Marruecos afirmaron estar en situación irregular.
El Gobierno marroquí ha lanzado dos campañas de regularización de emigrantes: en 2014, que supuso la entrega de documentos para 23.000 personas, y en diciembre de 2017, a la que se presentaron 28.000 candidatos que obtuvieron sus documentos en su mayor parte.
Las ONG presentaron este informe ante el Consejo de Derechos Humanos (CDH) de la ONU dentro del Examen Periódico Universal (EPU), donde los Estados miembros exponen sus esfuerzos para cumplir con sus obligaciones en la materia y que permite a las asociaciones contrarrestar las versiones oficiales.
Incluye 73 recomendaciones, cinco de ellas son generales mientras que el resto están vinculadas con el empleo, sanidad, enseñanza, protección social, desigualdad regional, cultura y los derechos del niño, mujeres, emigrantes y las personas con necesidades especiales.
Yo les diría a estos señores de asociaciones humanitarias, que en vez de reprender tanto a Marruecos como a España en que no se deporten a estos emigrantes ilegales, que se trata de un problema de Estado, y que hay que atajar urgentemente y tajantemente. La emigración masiva hacia países superpoblados o con economías muy ajustadas, no puede ser aceptada por problemas obvios de falta de recursos, y con solo cabida para una oferta laboral especializada.la crítica debe de hacerse dirigida a los gobiernos de esos países exportadores de emigrantes.