Los ciclistas melillenses que está tomando parte, en estos días, en la Titan Desert 2019 al igual que el resto de participantes en esta competición de alto nivel en el mundo del ciclismo de montaña no se vistieron de corto en la jornada de ayer debido a la suspensión de la etapa debido al fallecimiento del ciclista español Fernando Civera.
El ciclista fallecido se encontraba en una "zona complicada de dunas, fuera de la zona habitual marcada por los aparatos de navegación", en el kilómetro 55 de la segunda etapa, que se disputó entre Merzouga y Ouzina, de 105 kilómetros.
Civera pulsó el dispositivo de seguridad para alertar a la organización y un helicóptero medicalizado acudió de inmediato al rescate, pero los médicos, tras realizar las maniobras de reanimación, nada pudieron hacer por salvarle la vida. El silencio del desierto se multiplicó por 650 para el mismo número de participantes en la Titan Desert que con dolor pasaron la noche en una jaima común en Ouzina tras conocer justo antes de la cena la noticia de la muerte del español Fernando Civera en una zona de dunas en el transcurso de la segunda etapa.
No hubo etapa cronometrada, no hubo competición, el trayecto entre Ouzina y Merzouga fue una marcha de homenaje al debutante zaragozano de 46 años víctima de un fallo cardíaco en un lugar solitario, entre montañas de arena, un enclave inhóspito donde le asaltó la muerte.
Miradas al suelo, rostros de dolor y nula motivación para salir a afrontar la tercera etapa, pero el grupo salió compacto, sin competir, hasta llegar a Merzouga, el punto inicial de la 14 edición.
Todos los participantes intentarán volver a la normalidad en la jornada de hoy con la disputa de una nueva etapa por territorio marroquí.