A expensas de que se abra un museo taurino en el coso, la cabeza de la res indultada en 2013 por ‘El Fandi’ vive en este local, que se caracteriza por su decoración característica sobre la Fiesta Nacional.
Llegada la Feria de Melilla 2015, en la redacción de El Faro surgió una pregunta: ¿Qué fue de la cabeza de Miraclaro, el toro que hace dos año fue lidiado por ‘El Fandi’ y que fue indultado dada la bravura del animal en el ruedo?
La decisión que se tomó hace ahora dos veranos fue realmente histórica en Melilla, puesto que se trató de la primera vez que un toro era indultado en la Mezquita del Toreo. Tanto fue así, que se llegó a la determinación de hacer un busto con la cabeza de la res para recordar este acontecimiento insólito en la ciudad.
Se supo que el animal, pese a ser indultado, fue sacrificado dado que, entre otras cosas, la disposición geográfica de la ciudad hacía casi imposible devolver al animal a su lugar de procedencia. Así pues, la Ciudad Autónoma decidió rendir homenaje a Miraclaro buscando para su cabeza un lugar de honor en la Mezquita del Toreo para recordar este momento histórico.
La Cantina
A pesar de esta decisión, las instalaciones de la Plaza de Toros de la ciudad no estaban en condiciones para acoger este recuerdo taurino, puesto que estaba por acometerse una reforma que ha terminado precisamente este año, y las localizaciones del coso, por aquel entonces, no estaban tan transitadas como lo están ahora.
Por lo tanto, en base a esta decisión, la cabeza de Miraclaro reside actualmente en un bar de la ciudad que se caracteriza por su pasión y decoración, que tiene como motivo central la Fiesta Nacional: La Cantina.
Puede que para muchos de los clientes pase desapercibido el hecho de que esa cabeza en concreto sea un trozo de la historia taurina de Melilla, puesto que en el propio local hay varias cabezas de ganado en las paredes.
Los trabajadores de este bar comentan a El Faro que la decisión que tomó la Ciudad fue en base a la pasión e impulso que dice que ha dado siempre La Cantina a la Fiesta Nacional en Melilla y a que siempre se han mostrado colaborativos en cuanto a las corridas de toros que se desarrollan en nuestra ciudad.
Asimismo, explican que se trata de una cesión temporal, que en ningún caso ha sido un regalo de la Administración, puesto que se debe a que, hasta el momento, la Plaza de Toros no reunía las condiciones para albergar este trofeo del mundo taurino.
Finales de año
Sin embargo, pocos meses atrás, la cosas cambiaron en el panorama de la tauromaquia en la ciudad, puesto que terminaron los trabajos de remodelación de la Mezquita del Toreo, un remozado que permite que el coso esté abierto los 365 días del año para recibir visitas y que cuente con instalaciones nuevas.
Así pues, según explicó a El Faro Francisco Díaz, viceconsejero de Festejos, la Ciudad se plantea trasladar a Miraclaro al coso antes de finales de año. Para ello, Díaz asegura que deben acometerse aún algunos trabajos de acondicionamiento relativos a ciertas humedades que hay en la plaza, pero que todo va po buen camino.
Asimismo, la idea de la Viceconsejería es que se establezca una especie de museo taurino de Melilla, en el que, además de la cabeza de la res, puedan verse otros detalles de la historia del mundo del toreo en la ciudad.