Cada español gastó el año pasado 999,98 euros en hostelería, según la Encuesta de Presupuestos Familiares publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que vendrían a ser unos 19 euros a la semana. En este informe, también se reflejan los datos por autonomías aunque las cifras de las dos ciudades autónomas no se incluyen. Por ello el Faro ha salido a la calle comprobar cuánto gastan en bares los melillenses.
Encuestados por este diario coinciden en que la cifra media española puede corresponderse con la de Melilla. Paola, una melillense, explicó a El Faro que ella suele salir mucho a cenar, sobre todo los fines de semana. Normalmente, suele gastarse unos 20 o 25 euros cada vez que sale, por lo que sumando llegó a la conclusión de que invertirá algo menos de mil euros al año.
"Merece mucho la pena, llena bien el estómago y está muy bien", señaló la joven.
Otros melillenses creen que la cifra se les queda un poco corta y que incluso ellos suelen invertir algo más al año. Es el caso de José, que apuntó que él gasta más de mil euros al año en salir a comer o a cenar fuera de casa.
Pero si hay un momento del día preferido por muchos melillenses para tomar algo es por las mañanas. Desayunar en bares o cafeterías es de las actividades preferidas de muchos, al igual que merendar. En varias cafeterías de la ciudad lo notan. En el café Arábica, uno de sus camareros, Mohamedi, aclara a este diario que tiene clientes que van todos los días sin falta a desayunar a su lugar de trabajo.
Estos clientes, según dijo, pueden gastarse al día entre unos 3 y 5 euros, por lo que al año suelen invertir unos 400 euros de media.
En otro establecimiento, Brisamar, Aisa incluso eleva esta cifra. Él es encargado del bar y subraya que desde su apertura hace cuatro años, reciben la visita de muchos clientes tanto para desayunar como merendar todos los días. Según él, por persona podrían gastarse perfectamente más de mil euros al año.
Esta predilección por los bares y cafeterías frente a restaurantes también queda patente en los comentarios de varios encuestados por este diario como Ángela. Esta melillense destaca que no es muy de salir a comer o a cenar, pero que el té diario de las tardes con su hija no lo perdona. A pesar de que no se atreve a aventurarse a decir una cifra concreta de gasto anual en hostelería, aclara que se lo puede permitir afortunadamente.
Es lo mismo que opina Estrella, otra melillense que hace hincapié en que no le gustaría ser la más rica del cementerio. El dinero está para gastarlo y esa es su filosofía. Por ello sale todas las mañanas después de ir al gimnasio a tomarse algo a su misma cafetería de siempre.
Datos por autonomías
A pesar de que la media española casi roza los mil euros anuales de gasto en hostelería, estos datos son muy heterogéneos según las comunidades autónomas. En función de la región en la que se resida, la diferencia puede alcanzar hasta los 650 euros entre la zona en la que más gastan sus habitantes y en la que menos.
El pasado año 2022 fue Euskadi la autonomía que se alzó con el primer puesto del ranking. Sus ciudadanos invirtieron en tomar algo fuera de casa unos 1.359 euros, lo que supone unos 26 euros a la semana por residente. En la lista se siguen Navarra, con 1.234 euros de media, La Rioja, con 1.181 euros, y la Comunidad de Madrid con 1.124 euros.
El el extremo de la clasificación se encuentra Canarias, región en la que menos se gasta en bares con una media de 706 euros por persona y año. Tras las islas están Castilla-La Mancha, con 778 euros, Cataluña, con 825 euros, y Cantabria, en la que sus habitantes invierten 875 euros.
Por debajo de la media nacional de los 1.000 euros se sitúan Región de Murcia, Baleares, la Comunidad Valenciana y Galicia.
Variaciones anual
España es un país en el que se consume bastante en los locales de hostelería. El clima, la oferta gastronómica y el carácter de los españoles hace que los bares estén casi siempre llenos. Cada uno dependiendo de su economía familiar.
Bien es cierto que el consumo ha variado mucho a lo largo de los años dependiendo del contexto económico del país. De esta manera, el año 2007 alcanzó el pico máximo histórico con 1.095 euros de gasto anual por persona y cayó en picado durante los años de la crisis. En 2013 marcó mínimos con 788 euros.
Tras muchos años en los que la cifra no consiguió remontar, 2017 marcó el punto de inflexión que hizo que se volvieran a alcanzar los 1.000 euros de gasto medio. Una cifra que no se ha vuelto a conseguir desde entonces y que sufrió en los años de la pandemia.
En 2022 se equilibró aunque con grandes variaciones entre autonomías. Así, Extremadura fue el año pasado la región que más incrementó su gasto en hostelería respecto a 2019 muy por encima del resto. Los extremeños aumentaron su consumo en 287 euros, muy por detrás de la siguiente zona en la tabla, Andalucía, que aumentó en 190 euros o Galia con 147 euros más.