El ciberacoso de padres a profesores aumentó a nivel nacional un 4 por ciento en el curso escolar 2020/21, al pasar del 5 al 9 por ciento, mientras que el de alumnos a docentes se mantuvo en un 11%, según el último informe del Defensor del Profesor del sindicato independiente ANPE. Melilla, Ceuta y País Vasco, son las regiones donde menos casos de acoso de progenitores a docentes se atendieron.
El presidente de ANPE, Nicolás Fernández, y la coordinadora estatal del servicio del Defensor del Profesor, Laura Sequera, han presentado este miércoles este informe que muestra, según han coincidido, un "preocupante aumento" en los casos de acoso y violencia hacia los docentes.
Según sus datos, el número de profesores que pidieron ayuda al servicio del Defensor del Profesor durante ese curso fue de 1.690, 366 más respecto al año anterior, debido a la vuelta de los alumnos a las aulas, tras permanecer cerradas por la pandemia.
De ellas, solo Madrid acumula casi el 48 por ciento de las actuaciones en el conjunto de España, al haberse registrado en esta comunidad un total de 932.
A mucha distancia le siguen Andalucía, con el 10%, Galicia (7%), Murcia y Canarias (con casi un 7% en ambos casos). Por contra, el País Vasco, además de la ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, fue la comunidad donde menos casos atendieron en el curso pasado.
Por etapas educativas, el informe revela que los maestros de educación Infantil y Primaria son los que más ayudas solicitaron, en concreto 980, es decir el 50 por ciento del total, y los de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato 745, el 38 por ciento.
En cuanto a los tipos de casos atendidos, destaca los correspondientes a la convivencia entre docentes y alumno, así como los relacionados con los padres.
Las amenazas de los estudiantes a profesores se incrementaron levemente, en concreto un 1% (pasaron del 12 al 13%); los problemas que tienen los docentes para dar clase un 2%, al pasar del 21 al 23%, y las faltas de respeto pasaron del 22 al 23%.
Por lo que se refiere a los padres, se produjo una subida en cuatro de los 7 indicadores: el ciberacoso (un 4%); faltas de respeto (un 2%), acoso de los progenitores (1%) y denuncias (3%).
En cuanto a la salud del profesorado, el informe destaca que el 77 por ciento de los casos atendidos presentaban niveles de ansiedad impropios de la tarea que desempeñan; un 11% mostraban síntomas depresivos y un 10% estaba de baja laboral.
Unos datos que preocupan a este sindicato, toda vez que "revierten directamente en la calidad educativa en los centros escolares".
Ante esta situación, el presidente de ANPE ha reclamado la necesidad de desarrollar la Ley de Autoridad del Profesorado a nivel estatal, con medidas que dignifiquen la labor docente y favorezcan un clima de convivencia adecuado.
Igualmente ha pedido un protocolo de actuación para casos de acoso y la elaboración de un Plan Estratégico de Mejora de Convivencia Escolar en los centros educativos.
El informe, que no incluye todos los casos que se producen sino los que llegan al Defensor del Profesor de ANPE, pretende concienciar a la sociedad de este problema para buscar soluciones.