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Aún así, Seguridad Ciudadana y Medio Ambiente ponen en marcha una campaña para evitar incidentes
Melilla es la única autonomía donde no se han producido muertos por ahogamiento en lo que va de año, según los datos publicados ayer por la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo.
El año pasado se registraron cuatro fallecidos por ahogamiento en aguas de la ciudad, mientras que en 2015 fueron tres.
No obstante, desde la Consejería de Seguridad Ciudadana se ha puesto en marcha una campaña conjunta con Medio Ambiente que, en una primera fase, se va a centrar precisamente en evitar ahogamientos.
El objetivo es prevenir y concienciar a los melillenses para que tengan cuidado porque, en cualquier momento, puede haber marejada, se puede perder pie o sufrir un desmayo, con los consiguientes riesgos para el bañista.
La campaña consiste en el reparto de trípticos que recogen información sobre qué indican los diferentes colores de las banderas que ondean en las playas y de manguitos para los más pequeños. También se ofrecerán pulseras naranjas para identificar a pacientes con diabetes y con patologías cardíacas, y azules para niños, personas mayores o que sufran algún tipo de discapacidad y que pueden perderse.
La segunda fase de la campaña conjunta entre las dos consejerías se centrará más en aspectos de medio ambiente.
Datos nacionales
Según el comunicado de la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo, en toda España, 305 personas han muerto por ahogamiento hasta julio, un 14,66% más que en los siete primeros meses de 2016.
En julio, 95 personas perdieron la vida en espacios acuáticos españoles, el mes con el número más alto de víctimas desde que se registran las estadísticas por ahogamiento (año 2015).
El pasado junio, con 70 fallecidos por ahogamiento, es el segundo mes con más muertes por esta causa.
La federación alerta del aumento de muertes por ahogamiento en espacios acuáticos ya que, de enero a julio de 2017, se produjeron 39 víctimas mortales más que en el mismo periodo de 2016 y 93 más que en el de 2015.
Por comunidades autónomas, Andalucía es el espacio donde más muertes se han registrado por esta causa: hasta julio, 57 personas han perdido la vida en las aguas andaluzas, un 18,7% del total.
Le siguen Galicia, con 45 ahogamientos mortales (un 14,8 % del total); Canarias y la Comunidad Valenciana, con 42 muertes cada una (13,8%); Cataluña, con 28 (9,2 %); y Cantabria, con 17 (5,6%).
En Baleares, 15 personas han perdido la vida por ahogamiento; en Murcia, 13; en Castilla y León, 10; en Extremadura, 8; en Aragón, 7; en la Comunidad de Madrid, 5; en el País Vasco, otras 5; en Castilla-La Mancha y Ceuta, 3; en Asturias y La Rioja, 2; y en Navarra, 1.
El perfil del fallecido por ahogamiento es el de un hombre (en el 80% de los casos), de nacionalidad española (75%) y de 35 o más años (70%). La mitad de las muertes registradas en lo que va de 2017 se ha producido en playas y el 91% del total, en espacios acuáticos sin vigilancia.