Melilla quiere homenajear a las llamadas “Madres de la Plaza de España” y a la matrona Loli Sáez con sendas calles en el barrio de la Libertad y sustituir las dedicadas al Falangista Pérez Oses y Coroneles Lacasas, respectivamente, en cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática. Así lo ha decidido este jueves el Pleno de la Asamblea, donde los diputados del PP propusieron la creación de un grupo de trabajo que estudie todas las propuestas que, en tal sentido, llegan a la Consejería de Cultura. El objetivo es que todas las distinciones y honores que otorgue la Ciudad Autónoma sean previamente consensuados para que salgan adelante por unanimidad.
La representante del PP en Cultura, Fadela Mohatar, explicó que su grupo había presentado varias iniciativas de ese tipo que ni siquiera se llegaron nunca a plantear en la correspondiente comisión y que eran muy anteriores a las que han salido aprobadas por unanimidad en el Pleno de esta mañana. Se refería a cuestiones como poner el nombre de Miguel Ángel Blanco a una calle melillense en el 25 aniversario de su asesinato por ETA y el de Fidel Pagés, inventor de la epidural en el centenario del descubrimiento de esa anestesia en Melilla.
“Se debería hacer un grupo de trabajo donde todas las propuestas se traten con seriedad para que no sean cosas de partidos sino de consenso”, razonó Mohatar quien dijo que los populares nunca han entendido por qué salen adelante iniciativas posteriores a las planteadas por ellos.
En cualquier caso, los expedientes llevados al Pleno fueron aprobados por la unanimidad de toda la Asamblea como representante del pueblo de Melilla. Y así, tanto las “Madres de la Plaza de España” como la matrona Loli Sáez tendrán sus respectivas calles en la ciudad.
En el primero de los casos, se trata de una propuesta formulada por el grupo parlamentario de CpM cuya portavoz en el tema, Yonaida Sel-Lam, quiso destacar el papel que aquellas mujeres jugaron en la consecución de derechos civiles por parte de la población bereber de Melilla después de que se promulgara una Ley de Extranjería en el año 1985 que los convertía directamente en “extranjeros en su propia tierra”. La idea es homenajear a las mujeres que, doblemente sometidas por su sociedad patriarcal y la legislación, salieron a la calle en la conocida como “protesta blanca” por sus vestimentas.
Estas abuelas, hijas y nietas, que pedían paz, derechos y justicia, fueron duramente reprimidas en su protesta en la Plaza de España a finales de enero de 1986 y el 10 de febrero de ese mismo año se ponía en marcha el proceso de nacionalidades dándose así el punto y final a aquella etapa convulsa que, sin embargo, dibujó lo que es la Melilla actual.
Loli Sáez, por su parte, es una matrona muy conocida en Melilla. La propuesta, realizada por la propia consejera de Cultura, Elena Fernández Treviño, se basa en los méritos profesionales de esta mujer “valiente”, de la que la socialista Gloria Rojas destacó su “profesionalidad y humanidad”. Nacida en el barrio Del Real, estudió enfermería en Málaga en los años 60 y se especializó como matrona. Prestó sus servicios en el antiguo Hospital de Cruz Roja y son numerosas las generaciones de melillenses que esta mujer ayudó a nacer.
Además, realizó una importante labor en la detección de drogas portadas por las mujeres tanto en el puerto como en el aeropuerto y fue la creadora del Centro Integral de la Mujer en el 2000. “Por su profesionalidad, por su humanidad y por todo lo hecho en Melilla, dedicarle una calle es más que merecido”, concluyó Rojas.
¿pero estas señoras, entonces, eran españolas o eran marroqui? pregunto
por ser enfermera te ponen una calle, asi de simple. esto raya en el ridiculo.