La temporada de Fútbol Sala en segunda división arranca este fin de semana y con ella el Melilla Fútbol Sala, que con sus problemas económicos en vías de solución podrá tomar parte en la competición liguera.
Su debut, hoy a las 18:00 horas en el pabellón Javier Imbroda Ortiz, no será nada fácil; no ya sólo por esos problemas que han estado a punto de retirarle de la competición, sino porque precisamente este hecho le ha impedido hacer una pretemporada y formar un equipo como merece la categoría.
Pero tampoco será fácil este debut porque el rival de los melillenses en esta primera jornada de liga es de armas tomar. ElPozo Ciudad de Murcia es uno de los equipos con más peso en la Segunda División del Fútbol Sala (el año pasado acabó cuarto) y desde luego es una de las canteras de prestigio de este deporte.
Pese a todas estas adversidades, desde el Melilla Fútbol Sala se quiere ser optimista.
Joaquín Huertas, segundo entrenador del equipo, así lo afirmó ayer en declaraciones a El Faro.
“Saltamos a la cancha con aspiraciones de ganar, eso siempre, pero sin obviar que ElPozo Murcia es un rival difícil y muy complicado. Nos podría haber tocado en esta primera jornada un equipo más asequible”, deseó Huertas.
El segundo entrenador no niega que pese a ser el primer partido de Liga, para el equipo melillense es prácticamente de pretemporada. “Arrancamos hace apenas dos semanas y todavía estamos dando forma a la plantilla. No hemos tenido pretemporada y eso se nota, pero vamos a compensar esta circunstancia de ir más atrasados respecto al resto de equipos con mucha ilusión y ganas”, manifestó el segundo entrenador.
Preparación
Apenas llevan dos semanas de preparación, sin tiempo para muchas cosas y sin tener la plantilla en su totalidad al completo.
En este tiempo, precisamente el segundo entrenador, a la espera de que llegara el primero, cargo que ostenta Carlos Alberto y que tomó las riendas del equipo hace sólo tres días, ha estado trabajando con los jugadores principalmente en intensidad y en un trabajo técnico-táctico para tratar de unificar y encajar a la plantilla.
El último toque de esta preparación fue en la tarde del pasado jueves, cuando el nuevo Melilla Fútbol Sala disputó un encuentro contra el Sporting Constitución.
Respecto a cuál va a ser el reto del equipo para esta campaña, el segundo entrenador lo tiene muy claro: “Intentar mantenernos y que el equipo no desaparezca. Vamos a empezar poco a poco, sin grandes aspiraciones y dando tiempo para ver hasta dónde llegamos”.