El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido ante la prensa en Melilla este sábado que las actuaciones de los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado aplican siempre "los márgenes de la proporcionalidad y el principio de la legalidad".
En ese sentido, el titular ha subrayado que, además, "estamos sometidos a nuestra propia evaluación sobre la actuación desarrollada en cada momento".
Asimismo, ha recalcado que hay dos conceptos que un Estado de Derecho "no se puede permitir". Por un lado, que sus fronteras, "que en este caso son también las de la Unión Europea", "sean agredidas violentamente". Por otro, tampoco se puede aceptar que los servidores públicos, "que generan el espacio necesario para que todos nosotros podamos ejercer nuestros derechos y libertades, sean agredidos".
Según ha lamentado Grande-Marlaska, cerca de 50 guardias civiles y tres policías nacionales "han sido violentamente agredidos" y hay "pruebas materiales" de eso.
En palabras del ministro, ha podido comprobar las consecuencias de haber tenido que afrontar dos saltos "extremadamente violentos y organizados", "que no se habían visto en otras ocasiones".
"Se han utilizado contra los agentes de nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad palos de unas dimensiones importantes" y "garfios", lo que ha dejado un saldo de medio centenar de heridos, cuyas lesiones hubieran podido ser "de mayor gravedad", de acuerdo con el propio ministro.
Durante su visita a la ciudad autónoma, Grande-Marlaska se ha reunido precisamente con los agentes heridos mientras defendían el vallado fronterizo de los últimos asaltos de inmigrantes.
Además de intercambiar con los mandos operativos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la ciudad sobre la más reciente crisis migratoria, el ministro ha sostenido un encuentro con la delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh.
La llegada de Grande-Marlaska coincide igualmente con las críticas de Amnistía Internacional por supuestos casos de devoluciones en caliente y de "violación de los derechos humanos" y "trato cruel" hacia los migrantes por parte de agentes de esas Fuerzas y Cuerpos en la valla.
Por lo visto Marlaska ha visto la actuación de las fuerzas del orden público con ojos diferentes al resto de los humanos,el defensor del pueblo,que es de su partido,de la ONU y las organizaciones humanitarias.