El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado este lunes que las fronteras de España con Marruecos en Ceuta y Melilla se abrirán "próximamente" tras más de dos años cerradas con el inicio de la crisis sanitaria del covid-19 (en marzo de 2020).
Aunque el Gobierno publicó la semana pasada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) una disposición general que prorroga el cierre de las fronteras de Ceuta y Melilla con Marruecos hasta el próximo día 30 de abril y, por tanto, se espera que estas se abran a primeros de mayo, el ministro no ha querido dar fechas precisas al ser preguntado por este tema durante su participación en los Desayunos Informativos de Europa Press.
En concreto, ha indicado que existe un grupo de trabajo sobre este tema que ya está trabajando en ello y la apertura se hará bajo los parámetros necesarios para que esta sea "gradual" de "común acuerdo entre Marruecos y España" y "siempre garantizando la seguridad y la salud" del conjunto de los ciudadanos.
En general, en materia migratoria, Grande-Marlaska ha defendido en su intervención la "apuesta" del Gobierno por "la cooperación" y la "ayuda al desarrollo" de los países de origen y tránsito de los flujos migratorios, así como la "complejidad de este tema" que, según ha criticado, va más allá de quienes dicen: "a los irregulares les metemos en un avión y a su país".
"Esto es un desconocimiento y un populismo barato", ha declarado el responsable del Interior, antes de explicar que para realizar la devolución el país de destino tiene que aceptarlo.
"Las soluciones sencillas son muy peligrosas"
En su explicación ha puesto como ejemplo Senegal y ha indicado que las remesas de migrantes que llegan de forma irregular a España desde este país suponen entre el 12 y el 15% del PIB del país africano. En este sentido, ha recordado que los dirigentes de estos estados "también se presentan a las elecciones" y "no les gusta que a sus nacionales se les devuelvan". "La relación tiene que ser de tú a tú Europa-África", ha defendido Grande-Marlaska, antes de señalar que esta es la postura del Ejecutivo.
"Las soluciones sencillas son muy peligrosas. No son soluciones son problemas", ha insistido en su intervención.
El responsable del Interior también ha defendido la relación Europa-África destacando la "presión migratoria" que también sufren países como Marruecos y Argelia de los países subsaharianos y ha apuntado que el reino alauí regularizó últimamente a unos 50.000 migrantes de esta zona del continente.
A su juicio, este desafío "exige políticas estructurales" de colaboración con el objetivo de que los jóvenes de estos países "no tengan esa necesidad de salir" como, según ha apuntado, España tampoco quiere perder a su población joven.
"Lo fácil del populismo es decir que es efecto llamada cuando es efecto huida", ha apuntado ministro, para señalar que a este problema es al que su departamento está "haciendo frente".
40 por ciento de inmigrantes interceptados en origen
Así, ha puesto en valor la reducción de llegadas que, según ha indicado, se ha producido en los primeros meses de 2021. Así, ha explicado que de los más de 2.100 inmigrantes que llegaron en la primera quincena de febrero se ha pasado a los 610 de la primera quincena de abril.
Del mismo modo, ha explicado que el 40% de los inmigrantes interceptados por las fuerzas y cuerpos de seguridad lo son en origen gracias a la colaboración de las fuerzas y cuerpos de seguridad españoles con estos terceros países en la lucha contra las mafias de trata de personas.
Finalmente, y preguntado por la puesta en marcha de la frontera inteligente en Ceuta y Melilla, Grande-Marlaska ha apuntado que estará lista "a finales de año" y ha destacado el "trabajo" realizado en esta materia y "la inversión de 50 millones" que ha supuesto.
Este sistema, ha indicado, también se aplicará al espacio Schengen, por lo que estos sistemas 'inteligentes' se aplicará en aeropuertos y puertos del país como frontera sur de UE.