La Casa de Melilla en Barcelona comenzó sus actividades de la primera semana de octubre con el pregón de la escritora ceutí, Malena Alonso.
Fuentes de información de la Casa de Melilla en Barcelona recuerdan a este Diario que en 2022, presentó un libro en el mismo lugar que este año ha realizado el pregón de la semana cultural de la Casa de Melilla en Barcelona, se trata de la obra ‘El viejo roble y la gran cueva’.
Malena Alonso se mostró muy agradecida por estar nuevamente en la citada institución catalana.
El libro realizado sobre Melilla es una obra histórica que data desde los principios de la ciudad hasta finales del siglo XX. Se trata del primer emplazamiento fenicio a que nombraron ‘Rusadir’.continuandoi a través de los años con el asentamiento del pueblo bereber.
Durante el Reinado de los Reyes Católicos, en el año 1497, la Armada Española al mando del comendador Pedro de Estopiñán, efectuó un desembarco el 17 de septiembre en la costa melillense entrando a un lugar deshabitado y destruido.
La tropa comenzó a reconstruir las murallas con almenas, iniciándose una repoblación progresiva y provocando la huida de las tribus bereberes que allí y en sus alrededores habitaban.
Ya en el siglo XX se instala en la ciudad el movimiento modernista, proveniente de Barcelona con el discípulo de Antonio Gaudí, Enrique Nieto. A partir de entonces comienza a diseñar edificios tan sobresalientes como el Ayuntamiento, hoy el Palacio de la Asamblea, la Reconquista, la Cámara de Comercio, la Casa Tortosa, la Casa de los Cristales, la Sinagoga y la Mezquita Central por mencionar algunos.
En aquel entonces llegan a Melilla otros arquitectos como Francisco Hermanz, Enrique Álvarez, Tomás Moreno, Manuel Becerra que desarrollan su imaginación en otros edificios como Casa de Félix Sáenz, Casa de Manuel Fernández, Casa de Agustín Espinosa, Héroes de España, Teatro Cine Perelló o antiguo Cine Español. Creando junto a otras corrientes arquitectónicas que la hacen la ciudad española con mayor representación de arte modernista después de Barcelona, con más de ochocientos edificios que forman parte del conjunto histórico Artístico de la Ciudad de Melilla.
Mencionó los primeros barrios de la ciudad, el barrio de San Cristóbal, el barrio de Cabrerizas, , el barrio de Batería Jota,, Barrio de Hernán Cortés y el más popular con el tiempo, el barrio del Real que se creó a principios del siglo XX y que visitan tanto residentes como foráneos.
Hizo hincapié en el desconocimiento de muchos españoles que no conozcan la realidad de Melilla, aunque forma parte integral de España, se percibe como lejana y ajena y este hecho priva a los ciudadanos de entender la riqueza cultural, histórica y social que aporta a la identidad española, al igual que sucede con la hermana ciudad de Ceuta en el Norte de África.
La despedida de la escritora fue un ¡Viva Melilla! Que agradó y sorprendió a todos sobremanera y el deseo de que “nuestros corazones sigan latiendo al compás de nuestra querida tierra”.