A partir de la entrada en vigor del nuevo reglamento del taxi aprobado esta mañana en el Pleno de la Asamblea, los vehículos dedicados al transporte público no podrán tener más de 10 años de antigüedad. Es una de las grandes novedades que se introducen en estas normas, que también obligan a los taxistas a mantener buena imagen y, en consecuencia, les prohíbe trabajar en chándal, bañadores, pantalones cortos o camisetas, según manifestó al respecto el consejero de Medio Ambiente, Hassan Mohatar.
El nuevo reglamento viene a renovar y actualizar las normas existentes, que datan de 1997. “Es preciso modernizarlo”, argumentó el consejero cepemista quien anunció que la actuación de su Consejería tenía por objeto amoldar el taxi a los nuevos tiempos. De hecho, por ejemplo, será obligatorio que se disponga de un datafono para que el cliente pueda pagar con su tarjeta, algo que no sucede en la actualidad. “Se busca una garantía para el interés público”, concretó Mohatar.
Entre las normas figuran también aquellas que van dirigidas a un mayor respeto del medio ambiente. En ese sentido, el consejero destacó la vida máxima útil del coche en 10 años (actualmente son muchos los que tienen entre 25 y 30 años) y puso de manifiesto las líneas de subvenciones que concede la Ciudad Autónoma, la segunda de las cuales acaba de hacerse pública.
Estas ayudas van dirigidas, básicamente, a la renovación de la flota de taxis de manera que esté compuesta por coches híbridos, híbridos enchufables y eléctricos.
En estos momentos, solo 28 de los 60 taxis que existen en Melilla cumplen con los requisitos medioambientales que exige la Consejería.
Además de regular aspectos relacionados con los trámites para la concesión de licencias, elaborar un registro de las mismas o establecer un régimen de sanciones con multas que pueden oscilar entre los 270 y los 2.760 euros, el nuevo reglamento fija los derechos y deberes de los usuarios.
Hassan Mohatar anunció, asimismo, que la Consejería ya se ha puesto con el servicio de radio taxis en Málaga para ver la posibilidad de que se incluya a Melilla dentro de las llamadas para solicitar el servicio. “Estamos trabajando en ello y esperamos poder cerrar el tema en estos meses porque cuesta bastante dinero”, comentó.
Tanto el PP como Vox se abstuvieron en la votación. Los populares argumentaron que “se ha perdido la ocasión” de tener una emisora propia e incluso de poder funcionar con aplicaciones informáticas para la petición de taxi, algo que, según dijo el diputado Manuel Ángel Quevedo, es la principal causa del por qué no se utiliza este servicio más a menudo. Por ese motivo, el PP aprovechó la ocasión para señalar que disponer de un método fácil de acceder a los taxis será un “tema importante en la cartera” del partido.