Cultura pone de nuevo en marcha esta iniciativa en las que se exponen las particularidades de cada religión.
La Consejería de Cultura inicia un año más ‘Conozcamonos’, un espacio de formación y debate en el que las diferentes confesiones de la ciudad explican las particularidades y características de sus ritos.
Ayer fue el turno de las comunidades cristiana y judía que atrajeron a un gran número de personas a las conferencias y que llenando el salón habilitado para ello en el hotel Tryp Melilla Puerto. Hoy tendrán la palabra la comunidad hindú y la musulmana en este mismo lugar a partir de las 20:00 horas.
Fe en la resurrección
La visión cristiana de la muerte, su sentido y el gran acontecimiento determinante para el cristiano que es la resurrección de Jesucristo fueron los principales puntos de la conferencia ofrecida por el vicario episcopal, Juan Manuel Barreiro López.
También dio una serie de pautas de cómo se lleva a cabo la celebración del rito funerario que “finaliza en la gran esperanza que los cristianos tienen de un cielo nuevo y una tierra nueva en la que el Señor habite con ellos para siempre”, aseguró.
Por otro lado, el vicario de la ciudad indicó que los ritos funerarios cambiaron a raíz del último concilio, entre los años 62 y 65, ya que hubo una gran reforma en todos los sentidos y una actualización. Así, Barreiro López informó de que los cambios llegaron a la expresión en la celebración de este rito, que vino marcada, por un lado, por la simplificación y por la idea de profundizar mucho más en las fuentes bíblicas. En segundo lugar, se tuvo en cuenta la experiencia de la Iglesia en cada lugar concreto “porque al estar presente en muchas culturas se asoma a la manera de expresar de cada una de ellas en este acontecimiento concreto de la muerte”.
Unción de enfermos
En otra de las ideas que el vicario determinó en su conferencia fue que el sacramento de la unción de enfermos, aunque relacionado siempre con la muerte, no se trata “del sacramento para el bien morir”, tal y como indicó, sino que es el sacramento de curación junto con el sacramento de la reconciliación y la penitencia. De forma que el fiel cristiano busca en este rito específico la curación y salvación de la mano de Jesucristo.
Tradición sin cambios
El rabino principal de la comunidad israelita de Melilla, Yamin Bittan Benzaquén, impartió en su conferencia cómo es la ceremonia de enterramiento al difunto y aseguró que en el judaísmo no ha cambiado nada y se mantiene la tradición tal y como se realizó con la sepultura de Moisés.
Otro de los temas destacados de esta ponencia fue el enorme respeto que se le tiene tanto al difunto como a la familia y, por lo tanto, se habló del dolor de los familiares y de la despedida del fallecido una vez que ha muerto y una vez que está enterrado.
En el judaísmo también creen en que después de la muerte hay una resurrección y que hay vida. Así, Bittan Benzaquén dio una serie de pautas que deben seguir los fieles judíos para conseguir esta nueva vida, como son cumplir la Toráh, los mandamientos, los preceptos, haciendo caridad, comportándose como humanos y amando al prójimo. En este sentido, aseveró que se deben poner en práctica todas esas cualidades que el ser humano tiene si desea entrar en el mundo venidero.
“Lo que enterramos es lo físico, no lo espiritual, ya que el alma la devolvemos a nuestro creador, esto es, al lugar de donde vino, y el físico se queda aquí en este mundo”, declaró.
Otro de los puntos de esta conferencia fue la idea de que el hombre debe de “volver a la tierra”, y para descubrir un judío cómo llevar a cabo este proceso explicó la historia de Caín y Abel, que fue el primer asesinato y entierro que hubo en la historia según La Biblia, tal y como argumentó.
Los dos representantes de estas religiones aseguraron la importancia de este tipo de conferencias para la ciudad, ya que es una buena forma de conocer los ritos de otras confesiones que conviven en el mismo lugar. Además, Bittan y Barreiro remarcaron que este espacio de charla es conocido en otros lugares de España e incluso fuera de las fronteras europeas llegando a Israel. De esta forma, la reunión anual de las cuatro confesiones permite mostrar esta riqueza de ritos.