José Palazón, de la asociación Prodein, afirma que el centro de La Purísima es “inhabitable”.
“Los menores que están en la calle sufren continuamente agresiones por parte de otra gente”, aseguró ayer a El Faro José Palazón, presidente de la Asociación Pro Derechos de la Infancia (Prodein).
Palazón hizo estas declaraciones después de que el jueves se supiera que un menor extranjero no acompañado (mena) fue brutalmente atacado por tres jóvenes cuando se encontraba en la zona de las escolleras del puerto. Según afirmó, esa agresión fue consecuencia “de que estén viviendo en la calle”.
Ese menor fue asaltado en dos ocasiones. En la primera de ellas, recibió un corte en su mejilla derecha que requirió numerosos puntos de sutura.
Tras haber denunciado este hecho ante la Guardia Civil, volvió a ser agredido por los mismos jóvenes, que eran tres. En esta ocasión, lo ataron de pies y manos durante cinco horas y volvieron a rajarle en la cara, esta vez en la mejilla izquierda, según informó el Instituto Armado. Uno de los tres agresores fue arrestado.
“Los niños no pueden estar en la calle”, proclamó Palazón. Aparte, aseguró que muchos menores acogidos en el centro de La Purísima acaban abandonando sus instalaciones porque “hay casos de maltrato”.
Menas que dejan La Purísima
“No digo que todos los educadores sean malos, pero hay elementos que sí”, especificó el presidente de Prodein. Por ello, aseguró que “espantan a los niños y hacen que se vayan”.
Según Palazón, es necesario “tomar medidas” para que La Purísima “sea un centro de atención como lo ha sido antes”. Así, insistió en que los niños de la calle son frecuentemente agredidos por “otra gente” como es el caso de “marroquíes y algunas pandillas de gente de aquí”, según declaró.
“La situación del centro de acogida ha sido mejor en otros tiempos”, señaló el dirigente de Prodein. En este momento, aseveró que “es inhabitable”.
Asimismo, criticó que se le retire la documentación a los menas acogidos en La Purísima que alcanzan la mayoría de edad. “Es inexplicable”, opinó. “Los menores tienen residencia por el hecho de serlo. Pero cuando cesa esa condición, se la anulan. Ser menor es un elemento negativo y debería ser todo lo contrario”.
Sin papeles en la calle
Palazón criticó que los menas que cumplen los 18 años “se quedan en la calle y sin documentación. Eso es lo grave”. Además, subrayó que la retirada de la documentación a estos jóvenes es una “política contraria a la ley”.
El presidente de Prodein destacó que en la zona de la escollera no sólo hay menas, sino que también “hay muchos mayores de edad”.
Palazón señaló que se desplazan hasta ese lugar gente que ha solicitado asilo en España y vive en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).
“A los sirios les dan la salida en 15 días, pero a los argelinos y marroquíes los tienen bloqueados en Melilla”, continuó Palazón.
“Hace dos días me enteré de que dos se marcharon del CETI aún teniendo la tarjeta roja de la solicitud de asilo”, contó. “No tienen otra alternativa y se acaban yendo al puerto”, explicó, en referencia a sus intentos de llegar a la península cuanto antes.