En la sesión matinal disputaron un encuentro de este deporte en el pabellón, como así se lo prometió el entrenador si ganaban el encuentro ante los navarros.
El primer equipo del Melilla Baloncesto ha cambiado por unas horas la pelota de baloncesto por el balón de futbol sala en su vuelta al trabajo tras las victoria del pasado viernes ante Grupo Iruña Navarra, en la jornada de ayer, todos los componentes del Melilla Baloncesto disfrutaron en una novedosa sesión de entrenamiento.
Lo prometido es deuda y a la tercera victoria consecutivo llegó el partido de futbol, así se lo prometió el técnico Gonzalo García de Vitoria a su jugadores. Dicho y hecho esta mañana la plantilla, tras trabajar en el gimnasio durante una hora, el equipo se ha desplazado hasta la pista del Javier Imbroda donde han disputado un partidillo de futbol sala entre los integrantes de la plantilla.
El equipo volvió a las instalaciones municipales en la tarde de ayer a partir de las 19:00 horas para realizar un entrenamiento de carácter táctico bajo las ordenes del técnico Gonzalo García de Vitoria y en el que se empezará a preparar la complicada visita del viernes a Burgos.
Una de las mejores noticias del cuadro de nuestra ciudad se tendrá en que el cuerpo técnico del Melilla Baloncesto dispone de todos los jugadores en plena disposición física para afrontar el encuentro de la jornada del viernes, con todas las garantías para conseguir el triunfo, aunque se sabe de la dificultad que entraña el partido puesto que se miden al Ford Burgos quizás el mejor equipo de la categoría y hecho única y exclusivamente para conseguir el ascenso de categoría, al final de la presente temporada.
Melilla Baloncesto conseguía el pasado viernes una importante victoria en el Javier Imbroda ante el Grupo Iruña. Una victoria que se cimentó principalmente en el acierto en tiros de tres puntos que logró el equipo que entrena Gonzalo García de Vitoria. Hasta en 15 ocasiones acertaron los melillenses el aro navarro desde más allá de la línea de 6,75. Los 15 triples logrados por el Melilla Baloncesto ante los navarros supone la segunda mejor marca en la historia del club, sólo superada por los 16 triples anotados por el conjunto melillense en la 2004/05 frente al Lobos Cantabria. En ese encuentro, que los melillenses se acabaron llevando por 84-71, fue testigo de la mejor marca triplista lograda por un jugador con la camiseta del Melilla Baloncesto con los 8 triples que anotó el base canadiense Joel Vickery. El record absoluto de lanzamientos de tres puntos en un partido lo tiene el Girona FC con 19 triples convertidos. Una marca conseguida en los playoffs de la temporada 2009/2010 precisamente ante Melilla Baloncesto.