Durante el fin de semana sólo estaba libre el 10% de las plazas l El buen dato se debe a la llegada de turistas de la Costa del Sol y al hospedaje de policías y guardias civiles para reforzar la valla fronteriza.
El sector hotelero de Melilla está de enhorabuena. Durante el recién concluido puente, los establecimientos de la ciudad autónoma registraron el mayor índice de ocupación en lo que va de año, con una tasa de casi el 90%. Eso sí, los empresarios del sector no quieren lanzar las campanas al vuelo, pues son conscientes de que los excelentes datos de los últimos días son fruto de una serie de circunstancias que han coincidido en el tiempo.
El presidente de la Asociación de Hoteleros, Elías Chocrón, informó en la jornada de ayer a El Faro de que la elevada de tasa de ocupación del fin de semana ha sido completamente inesperada. “Han sido unos días muy buenos, no podemos negarlo. Hacía mucho tiempo que los locales no estaban así”, subrayó.
Chocrón explicó que durante el puente han copado los hoteles unos 300 agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, aunque también ha llegado a la ciudad un elevado número de turistas. En el caso de los policías y guardias civiles, subrayó que se han convertido en huéspedes habituales a causa de la fuerte presión migratoria que soporta la ciudad autónoma, la cual hace necesario traer de manera frecuente refuerzos de la península para vigilar el vallado.
“Somos conscientes de que es algo atípico y que desvirtúa algo la tasa de ocupación, pero lo cierto es que la presencia de los agentes sirve para dinamizar el sector y mueve un poco la economía”, apuntó el presidente de la Asociación de Hoteleros. En la misma línea, remarcó que con el repunte de las entradas de inmigrantes a través del vallado se ha incrementado el número de efectivos de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Por otro lado, afirmó que durante el puente han visitado la ciudad un buen número de viajeros, principalmente extranjeros llegados de la Costa del Sol para pasar el fin de semana en Melilla. “No podemos dormirnos en los laureles y pensar que ya somos un destino turístico. Los últimos días han sido muy buenos, pero hay que seguir trabajando”, aseveró.
Asimismo, señaló que las comuniones también han influido algo en la alta tasa de ocupación hotelera. “Ahora está comenzando la época de estas celebraciones. Es algo que siempre ayuda al sector”, subrayó.
Chocrón insistió en que hay que tomarse estos datos con cautela y no darse por satisfechos. “Si hemos alcanzando un 90% de ocupación ha sido por una serie de factores poco frecuentes. Además, el buen tiempo durante todo el fin de semana también ha ayudado. Este buen resultado era algo que no esperábamos”, añadió el presidente de los hoteleros.
Además, aseguró que la llegada de viajeros se había dejado notar en otros sectores económicas de la ciudad, como el comercio y la hostelería. “Cuando viene gente, siempre repercute en beneficio del consumo”, concluyó Chocrón.
Así pues, el sector cierra cuatro días excelentes con la ilusión de que con la llegada del verano se incremente el número de viajeros que visitan la ciudad. Por el momento, los datos de este fin de semana sirven de balón de oxígeno a los hoteles melillenses, que han tenido un comienzo de año bastante complicado, con peores cifras que las registradas durante el pasado ejercicio.