Un joven melillense se enfrenta al pago de una indemnización de casi 2.000 euros que una madre y un hijo le piden por las lesiones que sufrieron en el accidente de tráfico ocurrido el pasado 5 de diciembre de 2012. El juicio se celebró ayer en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Melilla, con la ausencia de la representación legal de la compañía de seguros del denunciado, y quedó visto para sentencia.
Los hechos ocurrieron entorno a las 11:15 horas a plena luz del día en la rotonda de Carretera de Alfonso XIII, justamente en la salida del túnel. El coche del denunciado, de color gris, colisionó con otro de color naranja, con dos ocupantes. Según declararon éstos y una testigo, el denunciado no respetó la prioridad de paso en la rotonda, pues desde el carril interno de la glorieta quiso continuar la marcha por la Carretera de Alfonso XIII, colisionando con el vehículo naranja, que circulaba por el carril exterior de la rotonda.
En su declaración, el joven denunciado aseguró que cuando entró en la rotonda, nada más salir del túnel, su coche era el único que había en la rotonda, por tanto, considera que él tenía prioridad al estar dentro de la glorieta en primer lugar. Declaró ante el juez que puso la intermitencia para tomar la salida hacia a la Carretera de Alfonso XIII y que al mirar por el retrovisor no vio a ningún vehículo.
El caso quedó visto para sentencia con la petición de la parte denunciante de la pena mínima, diez días de multa a razón de dos euros diarios y el pago de la indemnización a los ocupantes del vehículo naranja, que suma casi 2.000 euros.