El niño que padece acoso escolar debe percibir el apoyo de sus compañeros y cuantos más defensores tenga, menos ansiedad y depresión sufrirá, asegura Johanna Alanen, directora del programa finlandés KiVa, que estudian importar Euskadi y Navarra.
Aunque en Finlandia no existía un problema “especialmente grave” de “bullying”, el Ministerio de Educación decidió que era necesario hacer frente a los casos que se daban, por lo que encargó una investigación que duró un año y que se plasmó luego en el programa KiVa, extendido a todo el sistema escolar una vez comprobados sus buenos resultados, explica Alanen en una entrevista con Efe.
Prevenir e intervenir
El plan se acompaña, según ha indicado, de una serie de materiales y herramientas para utilizar en la escuela, tanto alumnos como profesores, y destinados tanto a “prevenir” como “intervenir”.
“Somos conscientes de que no se puede eliminar totalmente el ‘bullying’, pero sí es posible marcar una orientación que sirva para prevenirlo y que se den menos casos”, afirma.
A los docentes, por ejemplo, se les plantean estrategias y se ponen a su disposición materiales didácticos, y los escolares tienen acceso a juegos de ordenador y materiales “on line” adaptados para diferentes plataformas.
Uno de los objetivos es implicar al alumno de manera que acabe comprendiendo que es bueno contar lo que ocurre a los profesores, pero para ello se les facilita hacerlo “de forma segura”.
El juego del buzón
Por ejemplo, hay un juego que les permite mediante “un especie de buzón” decir a los profesores lo que sucede, lo que evita así el “trato directo” al que muchos de ellos se resisten, señala Alanen.
“Se trabaja con los alumnos para que tengan el valor de hablar del problema con un adulto porque no se suelen a atrever”, añade la experta en acoso escolar.
Esa “seguridad” que menciona se hace extensiva también a la relación del “defensor” con la víctima, ya que consideran que no siempre es conveniente salir en su ayuda en el momento del acoso o la agresión, pero “sí después del ‘bullying’”, recalca a Efe.
“Lo que deben sentir las víctimas es que están con ellos, que los entienden, que no son indiferentes a su problema. Cuanto más defensores haya en la escuela estarán mejor, sentirán menos ansiedad y depresión”, ha recalcado.
Alanen ha indicado además en la entrevista que “los mecanismos del ‘bullying’ son iguales en todos los países”, que “lo que suele variar son las características de la persona que lo sufre”.
Por ello, cuando “exportan” el programa fuera de Finlandia, trabajan con especialistas locales para adaptar los materiales de KiVa, elaborados en inglés y que ahora se están traduciendo al castellano. De hecho hay sendos centros de Málaga y Madrid que lo están desarrollando ya porque su enseñanza es en inglés.
Alanen transmite un consejo a los docentes: “Deben ser persistentes, sistemáticos y constantes en el tiempo. Éste no es un plan para un año y luego olvidarse”.
Aunque sólo en su primera etapa, y con 10 años de retraso respecto al resto…
La Plaza de las Culturas, una de las más céntricas de la ciudad, se ha…
Este miércoles las temperaturas subirán ligeramente, con mínimas de 15°C y máximas, de 22°C. El…
Con asombro y decepción, veíamos a finales de 2016, cómo Donald Trump, un multimillonario exaltado…
Y mientras los efectivos del cuerpo de Bomberos regresaba de Valencia, ayer por la noche…