La actividad, que forma parte del programa de la Semana Europea de la Movilidad, tiene como objetivo enseñar a los melillenses a circular con sus bicicletas por la ciudad.
La primera jornada de Bici-Escuela, organizada con motivo de la celebración de la Semana Europea de la Movilidad, fue un éxito de participación. Casi 40 personas se dieron cita ayer, a las 12:00 horas, en la plaza Multifuncional de San Lorenzo, para participar en esta actividad, cuyo objetivo era enseñar a los asistentes a circular con su bicicleta por la ciudad.
Según explicó una de las voluntarias de Melilla ConBici, Olga Rubio, aunque el número de plazas era de quince, finalmente fueron muchos más los que decidieron sumarse al taller. Rubio señaló que los organizadores explicaron a los participantes que sólo los quince del cupo oficial podrían participar en el sorteo de una bici plegable que se realizará el próximo viernes, sin embargo muchos optaron por inscribirse fuera de este cupo, aunque no puedan optar a conseguir el regalo.
El objetivo de esta actividad, indicó Rubio, es que los melillenses aprendan a conducir sus bicicletas en el entorno urbano. Así, destacó que en muchas ocasiones los conductores de estos vehículos temen circular por la carretera y apuntó que el exceso de velocidad o el no respeto a algunas señales, por parte de los conductores de coches, provoca esta situación. Por ello, aseguró la voluntaria de la Bici-Escuela, es necesario que los ciclistas sepan bien manejar su bicicleta y que tengan claro que es lo que se van a encontrar cuando se muevan por la ciudad. Rubio indicó, además, que para qué la convivencia entre ciclistas y conductores de vehículos motorizados sea la más adecuada, también es necesario que los segundos sean conscientes de que hay espacio para todos en la carretera. “Hay conductores que piensan que los ciclistas no pueden circular por la vía y les piden que se aparten, pero eso no es así, tenemos que aprender a compartir el espacio”, aseveró.
Así, la clase comenzó con las explicaciones de Guillermo Moreno, de Melilla ConBici, que indicó a los participantes algunas nociones básicas sobre el funcionamiento mecánico de la bicicleta. En este sentido, apuntó que es muy importante que el ciclista conozca bien su vehículo antes de salir a circular.
Además, en la plaza se realizaron varios ejercicios de equilibrio y concentración, individuales y por parejas. Los ciclistas se movieron en un círculo cerrado intentando compartir un mismo espacio, además también circularon en parejas, para que fueran capaces de comunicarse con su compañero si era necesario, sin que por ello perdieran la concentración en la carretera.
Tras las clases en la plaza, los ciclistas realizaron un circuito por la ciudad divididos en grupos y acompañados por uno de los monitores voluntarios para que les fueran ayudando y marcando cuáles eran los puntos en los que tenían que poner más atención.