El Consejo Social de la Universidad de Granada (UGR) ha aprobado el anteproyecto de presupuesto para el ejercicio 2026, que alcanza una cifra histórica de 636 millones de euros, el mayor presupuesto aprobado hasta la fecha por la institución. Dentro de este marco, uno de los elementos destacados es la mejora de la financiación destinada a los campus de Ceuta y Melilla, una medida que busca ajustar los recursos a las particularidades y necesidades específicas de estos centros ubicados fuera de la península.
Según publica el medio especializado Nova Ciencia, el nuevo presupuesto incluye una revisión del modelo de asignación interna de recursos, lo que permitirá al campus de Melilla recibir una financiación más adecuada para afrontar sus desafíos estructurales, académicos y logísticos. Esta decisión forma parte de una estrategia de mayor equidad impulsada por el equipo de gobierno de la universidad, en la que se pretende reforzar la cohesión entre los distintos territorios en los que está presente la UGR.
El vicerrector de Economía de la institución explicó que este ajuste responde a la necesidad de atender de forma específica las condiciones de los campus alejados de la sede central en Granada. El nuevo modelo tiene como objetivo garantizar una distribución más justa de los recursos, teniendo en cuenta factores como la insularidad, la distancia geográfica, las infraestructuras disponibles y las limitaciones propias de cada campus.
En este sentido, se busca que los campus de Melilla y Ceuta puedan contar con mayor autonomía y capacidad de planificación, tanto en términos académicos como de gestión.
Este avance da continuidad al compromiso que el propio rector de la Universidad de Granada, Pedro Mercado, expresó públicamente hace unos meses. En aquella ocasión, defendió la necesidad de que el Gobierno central revisara el modelo de financiación para los campus de Melilla y Ceuta, solicitando una aportación específica que permitiera atender mejor las singularidades de ambos enclaves.
Tal como informó El Faro de Melilla en su momento, Mercado subrayó que estos centros no pueden ser tratados como una simple extensión de la sede principal, ya que desarrollan su actividad en contextos sociales y económicos distintos.
La mejora de la financiación interna por parte de la UGR se ve acompañada de gestiones dirigidas a conseguir un mayor respaldo por parte del Ejecutivo estatal. El equipo de gobierno de la universidad continúa trabajando para que el Gobierno aumente su contribución específica a estos campus periféricos, lo que permitiría consolidar y ampliar la oferta educativa, mejorar infraestructuras y fomentar la investigación en territorios como Melilla, donde la universidad tiene un papel clave en el desarrollo local.
El campus de Melilla, que depende orgánicamente de la Universidad de Granada, alberga diversas facultades y grados universitarios, y constituye una referencia educativa para cientos de jóvenes de la ciudad autónoma. Durante los últimos años, ha venido reclamando mejoras estructurales y una financiación adecuada que le permita equipararse en condiciones con otras sedes universitarias de mayor tamaño. Esta nueva dotación de fondos, prevista en el presupuesto de 2026, se percibe como un primer paso en la dirección correcta para alcanzar esos objetivos.
Entre las posibles áreas de mejora que podrían beneficiarse de esta ampliación presupuestaria se encuentran la ampliación de la oferta académica, el refuerzo de programas de investigación, la mejora de infraestructuras y equipamientos, así como el aumento de servicios de apoyo al alumnado. Además, una financiación más sólida permitirá al campus de Melilla incrementar su visibilidad y su capacidad de atracción de estudiantes, personal docente e investigadores.
Por su parte, el Consejo Social de la UGR valoró positivamente este avance, remarcando la importancia de que todos los campus se desarrollen bajo criterios de equidad y sostenibilidad. La aprobación del anteproyecto presupuestario es solo el primer paso de un proceso que continuará desarrollándose a lo largo de los próximos meses, hasta la aprobación definitiva de las cuentas y la distribución concreta de partidas.








