Salvo el San Roque de Lepe, ninguno de los primeros clasificados fueron capaces de ganar, lo que aprovechado por los azulinos.
El plantel del equipo unionista estaba deseoso de volver a competir para demostrar que aún quieren seguir vivos en la competición. Tras la derrota sufrida en Lepe y el empate cosechado en casa ante el Real Jaén a los azulinos no le quedaba otra que ganar en Écija. De lo contrario hubieran caído hasta la mitad de la tabla y el panorama, a estas alturas, sería bien distinto al que asoma. Sería un error sacar pecho ahora cuando lo único que se ha hecho es cumplir con los pronósticos al ganar a un equipo que, a pesar de la buena racha positiva en la que estaba inmerso, se confeccionó para intentar salvar la categoría con uno de los presupuestos más bajos del Grupo IV.
Lo bueno que tiene el fútbol es que a la hora de la verdad juegan once contra once. Y justo es de reconocer que cuando se gana ganan los jugadores y cuando se pierde también. Dicho esto, parece que los futbolistas de la UD Melilla han reflexionado y se han dado cuenta de que hoy por hoy es muy difícil tener la fortuna de pertenecer a un proyecto ambicioso, que opta siempre a estar en lo más alto de la tabla y en el que además el cobro está garantizado.
El equipo melillense tiene la obligación de luchar por intentar dar el salto de categoría. El primero que apoya esta propuesta y así lo manifestó en la recepción oficial que dio al equipo, es el Presidente de la Ciudad Autónoma. La subvención que recibe la entidad azulina así lo demuestra.
Es un hecho que el fútbol no está pasando por uno de sus mejores momentos. Es fiel reflejo de la crisis económica que afecta al País y vemos, a diario, las penurias por las que están pasando muchos equipos de nuestro panorama futbolístico. El Grupo IV no es una excepción y ahí está la situación por la que atraviesan equipos como el Poli Ejido, Estepona, Jumilla, Caravaca o Real Jaén. El propio Cádiz CF, uno de los aspirantes al ascenso, está gestionado por tres administradores concursales.
La UD Melilla es en estos momentos unos de los clubes más solventes de la categoría y con menos problemas económico, que no quiere decir que no los tenga, y es por ello también, y muy loable, que los aficionados quieran ver al equipo donde le corresponde. Es decir, luchando por meterse en los 'play off' de ascenso para luego intentar dar el salto de categoría. Luego se conseguirá o no pero hay que 'morir' en el intento. Es precisamente en este momento, en los tiempos que corren, cuando el Melilla debe aprovechar la debilidad de sus rivales y no conformarse ni perderse en proyectos de transición. Está claro que en el fútbol no hay paciencia y está claro también que para cuando lleguen los tiempos de bonanza, que llegarán, el Melilla volverá a competir en desventaja y eso lo tenemos claro los que llevamos mucho tiempo en esta tierra, algunos toda la vida.
Con el triunfo ante el Écija, la escuadra azulina vuelve a engancharse a la liga y vuelve a tener los puestos nobles a tiro de piedra. Cuatro puntos separan a los de García Tébar del Cádiz CF, cuarto clasificado y que a punto estuvo de llevarse la victoria en la Nueva Condomina ante el Real Murcia pero un zapatazo de Molino en el último suspiro evitó que los pimentoneros encajasen la primera derrota de la temporada en su feudo. Al Cádiz le bastó el orden para hacer relucir las carencias del equipo granate que a pesar de no brillar ante los equipos de más entidad del Grupo, se sigue mostrando como el más regular de la competición.La sorpresa de la jornada se produjo en 'La Consitución' de Yecla, donde el mejor equipo a domicilio del Grupo, el Sevilla Atlético, cayó ante un Yeclano que realizó un gran despliegue físico y que se agarró a la fe para remontar un marcador que se le puso adverso cuando el genial Luis Alberto consiguió un gol olímpico. De esta manera, la zona alta se comprime y los murcianos se aferran, por abajo, a la salvación.
El San Roque de Lepe le ha cogido el gusto a la zona noble y no está dispuesto a abandonarla por que sí. Los de Sergio Lobera, que venían de caer en Écija, no lo tuvieron fácil para doblegar a un Lucena enrachado pero una jugada de Gabri, de vuelta de tierras escocesas, terminó con el balón muerto en el área que Fernando aprovechó para anotar su segundo gol con la elástica aurinegra. Los leperos se mantienen firmes en la tercera posición de la tabla a la espera de lo que hagan el próximo domingo en Lorca.
Las lluvias caídas en la Ciudad Hermana hizo que el árbitro tomara la decisión de suspender el partido por el estado del terreno de juego del Alfonso Murube por lo que habrá que esperar una semana más para que la afición caballa vea ganar a su equipo en casa ya que hasta ahora, desde la llegada de Goikoetxea, no lo han hecho.
El Poli Ejido se mantiene en una cómoda posición en la tabla después de derrotar al Caravaca y el dicho de 'a entrenador nuevo victoria segura' no pudo darse en el debut de Antonio Montero Nene al frente del Estepona ya que los costasoleños no pasaron del empate ante el Puertollano.
Por último, el CD Alcalá, próximo equipo que visitará Álvarez Claro, se hizo con los tres puntos en juego ante un Real Jaén que llegaba enrachado. Los del Santo Reino sufrieron un inesperado traspié que supone un frenazo en seco a su progresión. Por su parte, los alcalareños recuperan la moral y esperan poder dar la sorpresa en Melilla.