Agentes de la Policía Local consiguieron que una joven melillense sufriera fuertes daños después de haber ingerido lejía y pastillas y encerrarse en el cuarto de baño de su casa, según afirman fuentes oficiales del cuerpo.
La intervención se produjo el pasado día 31 de enero en la calle Díaz Otero después de que una ciudadana alertase a las fuerzas policiales de que su hija había bebido lejía y se encontraba en ese momento encerrada sin querer salir del cuarto de baño.
A las tres y media de la tarde y tras ser comsionados por el 092, un indicativo que se encontraba cerca de esa calle se personó en el domicilio. Fue entonces cuando la mujer les informó de que la chica había ingerido lejía con pastillas y se atrincheró en el baño, donde permanecía encerrada con la puerta atrancada y un cuchicllo. La joven incluso amenazaba a la mujer con autolesionarse con el arma blanca si intentaba entrar para rescatarla.
La Policía Local inmediatamente tomó las riendas de la situación y un agente mediador consiguió convencer a la chica para que le dejase entrar donde ella se encontraba. Cuando accedió, el policía se apoderó de forma disimulada del cuchillo, que se encontraba sobre el lavabo, al tiempo que inició una conversación con ella para tratar de que depusiese su actitud.
El mediador, finalmente, logró entablar una conversación con ella. La joven le contó sus problemas y su deseo de continuar en la misma actitud, razón por la que se procedió a activar al Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias. No obstante, fue cuando la chica empezó a sentirse mal y mareada como consecuencia de la lejía y las pastillas que había tomado con una fuerte quemazón en el vientre, que el oficial de la Policía Local logró sacarla del baño.
Posteriormente, se hicieron cargo de la situación los servicios de urgencias del 061. La joven fue trasladada al Hospital Comarcal donde fue asistida y quedó después ingresada.
La salud mental es igual de importante que la salud física, por eso es importante intervenir antes de que sucedan este tipo de cosas, bravo por el policía y por la chica que acabo atendiendo a razones.