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El Banco de Alimentos continúa su reparto gracias a donaciones como la de estos melillenses
Desde hace varios años un grupo de trabajadores de Clece vende participaciones de lotería para llevar a cabo un proyecto solidario digno de admiración. Cobran un poco más por estas papeletas porque el dinero que recogen lo destinan a la compra de productos para el Banco de Alimentos de la ciudad. Este año han batido un récord: más de 480 kilos. Es su muestra de solidaridad con esta institución, que echa una mano a unas 3.500 personas con dificultades económicas.
La nave donde esta institución guarda los alimentos se llenó tras la Gran Recogida hace unas semanas. Pero todos esos productos se han ido repartiendo entre las familias y es necesario continuar recopilando alimentos para volver a contar con estanterías repletas.
Esta gran ayuda de los trabajadores de Clece es muy bien recibida porque desde hace un año los plazos de reparto por parte de esta institución son periódicos.
El objetivo es surtir a los beneficiarios de toda la variedad de productos que haya en ese momento disponible. Además, la mayor parte de las familias cuenta con niños y de ahí la importancia de que cada pocas semanas reciban bolsas con leche, pasta y otros alimentos.
De la península
La solidaridad también llega de la península porque acaban de instalar varios palés de tomate frito y macarrones en las estanterías. El objetivo de la entidad es contar siempre con un productos en su almacén para poder realizar ese trabajo de reparto cada pocos días.
Además, esta Navidad el Banco de Alimentos pudo entregar a sus beneficiarios alrededor de 23.000 kilos de mandarinas que llegaron donados de una cooperativa de la península.