Robles asegura que el trato que recibió la menor en el hospital fue “intachable” y el mismo que hubiera recibido una española.
El juzgado de primera instancia e instrucción número cuatro de Melilla ha decretado el sobreseimiento libre y archivo del caso de la niña marroquí que falleció en el Hospital Comarcal en noviembre de 2012, Aya Koudad.
El director territorial del Ingesa, Francisco Robles, informó ayer sobre el contenido del auto judicial de este procedimiento, en el que estaba imputada la directora médica del centro hospitalario, tras la denuncia presentada por los padres de la menor por un delito de omisión del deber de socorro.
La niña marroquí falleció por una leucemia tras permanecer ingresada casi 20 días en el hospital melillense. Su familia denunció a la responsable médica al considerar que se le había negado el traslado a un centro de la península, donde se le podría haber realizado un transplante de médula, un tratamiento que consideraba que podría haberle salvado la vida a esta menor.
Un trato profesional
El director territorial del Ingesa aseguró que el tratamiento que recibió la menor en el centro melillense fue “intachable”, algo que ya destacó hace unos meses cuando la familia de Aya Koudad acusó a los profesionales sanitarios de Melilla de tener un “trato sesgado, parcial o en todo caso poco profesional” con ella porque era extranjera. Robles afirmó que en el auto se “deja claro” que la menor recibió todas las atenciones necesarias como lo hubiera recibido una niña española.
También defendió que la directora médica actuó “pulcra y profesionalmente” en el desarrollo de la asistencia de la niña, tal y como recoge el auto.
El fallo judicial indica que “no puede producirse acto reprochable ni penal ni moral a la imputada ni a persona conocida. No hay acto omitido en la conducta médica que hubiese impedido el resultado letal de la menor”.
Además, Robles resaltó que en este auto se indica que este caso “no puede afectar a la reputación de la directora médico del Comarcal”. Por todo esto, afirmó que el Ingesa está muy satisfecho con esta resolución judicial. “Espero que no vuelvan a producirse casos como éste”, señaló.
“Inconsciencia” de los padres
El director territorial del Ingesa hizo hincapié en “la inconsciencia” de los responsables de la menor cuando tomaron la decisión de trasladar a Aya a Melilla en “condiciones clínicas muy deplorables para su estado de salud”.
Robles indicó que “posiblemente” la muerte de esta niña no se podría haber evitado aún trasladándola a otros hospitales. Recordó que la menor llegó a la ciudad procedente de otros centros hospitalarios marroquíes, donde había estado ingresada y en los que estuvo bien atendida.
Por otro lado, señaló que la actitud de los padres al querer trasladar a Aya a Melilla “crea un halo de sombra”. Explicó que hay que denunciar públicamente a las personas que desean aprovecharse de los “valores democráticos y de nuestro estado de bienestar” para “buscar una puerta de atrás” y no seguir los pasos que se exigen a cualquier ciudadano, en este caso, para recibir un transplante de médula. Robles aseguró que no se puede tergiversar esos valores y aprovecharse de ellos porque cualquier persona tiene seguir “el reglamento para optar a un transplante”.
Ingreso
De 20 días. Aya Koudad murió el 2 de noviembre de 2012 tras estar más de 20 días ingresada en el Hospital Comarcal. Los padres de la menor deseaban que su pequeña fuera trasladada a un hospital de la península para que se le sometiera a un transplante de médula, un tratamiento que consideraban que podría salvar su vida.
Sin
Traslado. El jueves 1 de noviembre el estado de la menor era crítico y la Asociación Pro Derechos Humanos decidió presentar el viernes 2 una denuncia en la Fiscalía de menores para interviniera en el caso y se produjera el traslado de niña. Pero este caso no llegó a ningún lado porque la menor falleció a las pocas horas.
Polémica
Entre hospitales. El Hospital Carlos Haya, centro de referencia para Melilla y con el que se tramitó la posibilidad del traslado de Aya, aseguró a El Faro que no se llegó a producir porque “el Comarcal tenía todas las competencias para procurarle una atención sanitaria”. En cambio, desde el Ministerio de Sanidad se informó de que el Carlos Haya rechazó el traslado por “motivos estructurales”. El Ministerio señaló que en Melilla “se atendió correctamente a la menor” y que cuando “estuvo fuera de sus posibilidades” se pidió su traslado.