Dentro de las competencias de la Guardia Civil, se encuentra específicamente la conservación de la naturaleza y medio ambiente, por ello se ha impulsado una campaña enfocada en la localización y detección de actividades ilícitas como el arrojo de vertidos y residuos.
Los impactos medioambientales por mala gestión sobre la eliminación de los residuos provocan contaminación atmosférica, hídrica, la degradación del suelo y la alteración de los ecosistemas, generando una preocupación significativa en la sociedad.
Por ello, y como en ocasiones anteriores, es fundamental la colaboración y concienciación ciudadana en este tipo de hechos.
Como bien define la Ley de Fomento al Reciclaje y Responsabilidad Extendida del Producto, un residuo es una sustancia u objeto que su generador desecha o tiene la intención u obligación de desechar de acuerdo con la normativa vigente.
Dentro del marco de esta campaña, la Guardia Civil de Melilla en la noche del pasado miércoles 5 de junio, y contando con la fundamental colaboración y conciencia ciudadana, recibe llamada telefónica alertando de la presencia de un hombre que, en la pista de Carros, concretamente en la zona cercana al campo de fútbol de la Cañada, arrojaba distintos residuos que transportaba en una furgoneta.
Trasladada patrulla de Seguridad Ciudadana a la zona, sorprende, identifica y denuncia a una persona que arrojaba piezas de desguace de vehículos en la Pista de Carros.
A su vez, se comprueba que la furgoneta donde transportaba los residuos arrojados, le constaba un señalamiento en vigor de embargo, por lo que es inmovilizado y puesto a disposición de la Tesorería General de Seguridad Social por ser el órgano reclamante.