La Benemérita inspeccionó 95 barcos de recreo y 21 motos acuáticas del 15 de junio al 31 de agosto.
La Guardia Civil de Melilla abrió este verano cuatro expedientes sancionadores a melillenses conductores de motos acuáticas. Dos de ellos se enfrentan a multas de hasta 1.000 euros por no llevar el chaleco homologado, una infracción de carácter grave prevista en el artículo 115.3.f) de la Ley 27/92, de Puertos del Estado y de la Marina Mercante.
En total, entre el 15 de junio y el 31 de agosto, la Benemérita inspeccionó en Melilla 95 embarcaciones deportivas y de recreo, en las que los agentes no hallaron ninguna irregularidad. También controlaron 21 motos acuáticas, según explicaron ayer a El Faro desde la Dirección General de la Guardia Civil.
Otras dos multas
La Benemérita no ha podido especificar los motivos por los que fueron multados los otros dos conductores de motos acuáticas sancionados este verano en Melilla. Sin embargo, hay que tener en cuenta que en todo el país las sanciones se han impuesto, principalmente, por la ausencia de póliza del seguro, del certificado de navegabilidad y de los títulos de los pilotos.
Asimismo, los guardias civiles verificaron que tanto las embarcaciones de recreo como las motos acuáticas desarrollaran su actividad en los espacios habilitados para ello.
En el conjunto del país el Instituto Armado realizó este verano 4.427 inspecciones de embarcaciones deportivas y de recreo y 1.004 propuestas de sanción a usuarios de este tipo de actividades acuáticas.
Estos controles sólo se hicieron en 29 provincias costeras españolas con el fin de mejorar la seguridad de los usuarios de embarcaciones de recreo y de motos acuáticas.
Las inspecciones las llevaron a cabo los Servicios Marítimos provinciales y las patrullas de Puertos y Costas de la Guardia Civil.
Las provincias de Alicante, Pontevedra y Cádiz recibieron el grueso de las inspecciones de la Benemérita a embarcaciones deportivas y de recreo. Respecto a las motos acuáticas, Las Palmas de Gran Canaria, Cádiz y Málaga fueron las provincias donde se registraron más controles.
Las multas
Cuatro sanciones a motos acuáticas en Melilla
La Guardia Civil ha abierto expedientes sancionadores a cuatro melillenses conductores de motos acuáticas. Dos de ellos no llevaban chaleco homologado y se enfrentan a multas de hasta 1.000 euros. En toda España el Instituto Armado ha realizado 1.004 propuestas de sanción.
Las inspecciones
Un total de 118 controles
Entre el 15 de junio y el 31 de agosto pasado la Benemérita realizó en Melilla 118 controles a barcos de recreo y motos acuáticas. La mayoría de las inspecciones (95) fue para los patrones de embarcaciones deportivas y recreativas. Ninguno de ellos fue multado. El resto (21) los conductores de motos acuáticas. Cuatro de ellos recibieron una propuesta de sanción.
Los elegidos
Controles en 29 provincias costeras españolas
El Instituto Armado llevó a cabo este verano inspecciones de barcos deportivos y recreativos y motos acuáticas en 29 provincias costeras españolas. Alicante, Cádiz, Málaga, Pontevedra y Las Palmas de Gran Canarias fueron las más controladas.
Los inspectores
Patrullas de Puertos y Costas de la Benemérita
Las inspecciones fueron realizadas por patrullas de Puertos y Costas de la Guardia Civil y por Servicios Marítimos provinciales.
La Policía Local detiene a un ladrón que rajó el cristal de un coche en el Real
La Policía Local de Melilla ha detenido a un individuo que fue sorprendido cuando trataba de robar en un vehículo que se encontraba estacionado en una calle. El arrestado rompió uno de los cristales del coche.
Según informó ayer la Consejería de Seguridad Ciudadana en una nota de prensa, la detención se produjo en la madrugada del pasado domingo en la zona del Barrio del Real.
Fue una patrulla, que se encontraba realizando una vigilancia rutinaria, la que se percató de un fuerte ruido, procedente de una calle próxima a la que se encontraban.
Al acudir al lugar, los agentes vieron cómo una persona acababa de romper la cerradura de una ventanilla corredera de un vehículo aparcado y que, debido a la fuerza ejercida, había terminado rompiendo el cristal.
Al apreciar la presencia policial, el individuo intentó huir sin éxito, ya que los agentes lo interceptaron a escasos metros del lugar.
Tras proceder a su identificación y comprobar que no contaba con residencia ni domicilio conocido en España, el hombre fue trasladado a dependencias policiales para abrir las diligencias correspondientes.
La Policía Local contactó con el propietario del vehículo, quien se personó en el lugar para hacerse cargo del mismo, manifestando su intención de presentar una denuncia.