La Guardia Civil ha dado un nuevo golpe al narcotráfico en Melilla al incautar 104,1 kilogramos de hachís que se encontraban ocultos en un vehículo, durante una actuación llevada a cabo el pasado fin de semana en el puerto de la ciudad. El operativo tuvo lugar en los controles rutinarios establecidos antes del embarque de pasajeros y vehículos en el buque con destino al puerto de Motril.
Los hechos ocurrieron cuando los agentes de la Sección Fiscal del Puerto, encargados del Resguardo Fiscal del Estado, identificaron un turismo de marca Renault, modelo Scenic. Tras verificar la documentación del conductor y observar ciertos indicios que despertaron sus sospechas, decidieron someter el vehículo a una inspección más exhaustiva. El conductor del coche, un hombre de nacionalidad española, fue detenido tras el hallazgo de la droga.
Durante el reconocimiento del vehículo, fue determinante la colaboración del Servicio Cinológico, ya que el perro adiestrado para la detección de estupefacientes marcó una zona concreta en los bajos del coche. Este comportamiento del animal guió a los agentes hacia la parte exacta donde se encontraba un sofisticado doble fondo, diseñado específicamente para el transporte ilícito de sustancias prohibidas sin levantar sospechas.
La experiencia y pericia de los efectivos permitió acceder al compartimento oculto, que estaba ubicado bajo los asientos del vehículo y que presentaba un acabado de gran calidad, simulando perfectamente la estructura original. Al abrirlo, encontraron numerosos paquetes envueltos que, tras su análisis, dieron positivo en hachís. El peso total de la droga ascendía a más de 104 kilos, lo que representa uno de los decomisos más importantes en lo que va de año.
Tras la incautación, el conductor del vehículo fue arrestado como presunto autor de un delito contra la salud pública, en la modalidad de tráfico de drogas. Tanto el hachís intervenido como el coche utilizado para su transporte fueron puestos a disposición de la autoridad judicial competente.
Según los cálculos de la Guardia Civil, la cantidad de droga intervenida habría alcanzado en el mercado negro el equivalente a unas 416.400 dosis, una cifra que pone de relieve el impacto que esta operación tiene en la lucha contra el narcotráfico. La intervención ha evitado que esta sustancia llegase a su destino final y fuese distribuida para su consumo, lo que supone un éxito en términos de salud pública y seguridad ciudadana.
El puerto de Melilla se mantiene como un punto clave en las rutas del narcotráfico que operan entre el norte de África y Europa. A pesar del incremento de controles y de las mejoras tecnológicas aplicadas a la detección de drogas, las redes criminales siguen ideando nuevos métodos para eludir la vigilancia.
No obstante, la formación constante de los agentes y el uso de técnicas avanzadas de análisis de riesgo han sido fundamentales para identificar patrones sospechosos y evitar que operativos como este logren su objetivo.
Este caso se suma a una serie de actuaciones que han tenido lugar en los últimos meses en la ciudad. Cabe recordar que en noviembre de este mismo año, la Guardia Civil intervino uno de los mayores alijos de droga registrados en la ciudad en la última década, según informó El Faro de Melilla en su momento.
La reiteración de este tipo de hechos evidencia que la presión de las fuerzas de seguridad está resultando efectiva, aunque también señala que Melilla sigue siendo utilizada como enclave estratégico por las organizaciones criminales dedicadas al tráfico de estupefacientes.
Desde la Comandancia de la Guardia Civil se ha resaltado la importancia del trabajo coordinado entre las distintas unidades, y se ha subrayado el compromiso de seguir intensificando los esfuerzos para luchar contra esta lacra que afecta tanto a la ciudad como al conjunto del país. Asimismo, se ha recordado a la ciudadanía la relevancia de colaborar con las fuerzas de seguridad para contribuir a la detección temprana de actividades ilícitas.
La operación concluyó con la intervención de la droga, el decomiso del vehículo y la puesta a disposición judicial del presunto autor. Las investigaciones continúan abiertas para determinar si el detenido actuaba solo o formaba parte de una estructura criminal más amplia.









Seguro que te pones hasta las cejas de todo y por aquí recriminas , hipocresía, los primeros en consumir son los políticos jueces picoletos y maderos , se ponen ciegos de todo .
Y también lo que comes el pescado y verduras , muerto hambre
TODO lo que nos llega de Marruecos es auténtica basura. ¡Viva la Guardia Civil!