La semana pasada, CSIF se hacía eco de la reivindicación de docentes, familias y equipo directivo del CEIP Reyes Católicos de Melilla, debido a las precarias condiciones del centro para poder realizar Educación Física o tener un recreo en condiciones mínimamente dignas. Hoy queremos realizar una reflexión más profunda sobre el tema e ir un poco más allá.
En nuestro país existen dos zonas climáticas claramente diferenciadas: el norte, lluvioso (aunque ahora menos) y frío y el sur, cálido y seco (cada vez más).
En función de sus características, en el norte se han acondicionado todos los centros educativos con calefacción para paliar estas circunstancias, mientras que en el sur parece ser que no importa tanto el calor que se sufra en las aulas, aunque éste condicione negativamente el devenir de las actividades escolares. En pocos lugares se ha provisto a los centros de aires acondicionados, ni de surtidores o depósitos de agua potable para soportar las altas temperaturas que sufrimos, especialmente en los últimos tiempos.
Además, hay que añadir que el cambio climático es una realidad con la que nos vamos encontrando día a día. Es palpable que no hemos tenido primavera. Hemos pasado de un invierno frío y seco a un verano tórrido y seco en el mes de abril (tradicionalmente lluvioso), más semejante a temperaturas propias de los meses de julio y agosto. Y no tiene visos de mejorar.
No es que el sindicato CSIF nos hayamos convertido en servicio meteorológico o en activistas medioambientales, sino que nos preocupa hondamente la situación en la que están trabajando nuestros docentes y nuestro alumnado en las aulas de los colegios de Melilla, aunque sí hemos observado que cualquier dependencia del Ministerio de Educación en Madrid o en la Dirección Provincial de nuestra ciudad, así como en cualquier dependencia de la Ciudad Autónoma cuentan con equipos de aire acondicionado o climatizadores. Y por lo tanto, CSIF se pregunta: ¿Son docentes y alumnos menos importantes o sus derechos a la hora de desempeñar sus tareas no son tan dignos como los de los trabajadores que disfrutan de aire acondicionado en sus oficinas?
La mayoría de las aulas de los centros educativos de Melilla no tienen estos equipos y muchos de los que los tienen, al no contar con potencial eléctrico suficiente, no los pueden utilizar.
No es hora de rebotar problemas de una administración a otra, según el color que tengan, es hora de trabajar de forma coordinada para aportar YA soluciones a la ciudadanía de Melilla.
El sindicato CSIF no quiere promesas sino actuaciones inmediatas ya que el problema requiere soluciones urgentes. Ya ha habido tiempo para dar respuesta a estas necesidades que equipos directivos, profesorado y familias llevan años reclamando. Ahora, para este curso, ya es tarde, el calor intenso está ya instalado en nuestros centros, en pleno periodo escolar. Cuando el calor remita (no sabemos cuándo) ya se habrán olvidado hasta el siguiente verano, que no tardará en volver.