Comerciantes de Beni Enzar pedirán una reunión con El Barkani para explicarle cómo les afecta la medida.
La Delegación del Gobierno de Melilla no da marcha atrás en su decisión de desviar el tráfico de mercancías del ‘comercio atípico’ hacia el paso fronterizo de Barrio Chino.
Las protestas de los comerciantes de la zona de Beni Enzar, afectados por la medida, no han cambiado ni un ápice el discurso de la Delegación del Gobierno: “La mercancía tiene que pasar por Barrio Chino”, aseguraron ayer fuentes de la institución.
No obstante, aclaran que se seguirá permitiendo que salga por Beni Enzar todo lo que se destine únicamente al consumo propio.
Desde la Delegación del Gobierno aseguran que El Barkani recibió “hace unos meses” a los representantes de los comerciantes de la zona de Beni Enzar y afirman que en esa ocasión les transmitió su propuesta de desviar todo el ‘comercio atípico’ a Barrio Chino.
Asimismo aclaran que la semana pasada, previa al ‘blindaje’ de Beni Enzar para evitar el paso de porteadores, el delegado se reunió con portavoces de la Cámara de Comercio y de la Asociación de Comerciantes (Acome) de Melilla, unas organizaciones que El Barkani entiende que representan a los empresarios de la frontera.
Cita con El Barkani
Sin embargo, la explicación de la Delegación del Gobierno no convence a los comerciantes de Beni Enzar. “Nos reunimos con El Barkani para presentarnos como asociación. El delegado nos comentó que se desviaría el paso de los bultos de ropa usada que cargan los porteadores hacia Barrio Chino, pero no nos dijo que no dejarían pasar mercancía por Beni Enzar”, señaló ayer a El Faro Abdelkader Abdeselam, vocal de la Asociación de Comerciantes y portavoz de los empresarios de la frontera.
Esta semana que no se ha permitido la salida de mercancía por el principal paso fronterizo de la ciudad, los comerciantes de Beni Enzar aseguran que han dejado de ingresar el 85% de lo que registraban en sus cajas en un día normal.
Por este motivo ayer convocaron una reunión a la que no sólo asistieron los empresarios que tienen tiendas de productos ‘al por mayor’ en los alrededores de la frontera sino también varios almacenistas de Melilla que también se están viendo afectados por el cierre del paso de Beni Enzar al ‘contrabando’ ya que sus clientes son los que no pueden pasar la mercancía por esta frontera.
“Hemos decidido que como no convocaron a nadie de la frontera a la reunión con el delegado del Gobierno, vamos a pedir audiencia con El Barkani porque no sabemos de qué va esto y queremos que nos lo explique”, aseguró ayer a este periódico Abdeselam.
En la reunión que mantuvieron en Beni Enzar, la mayoría de los participantes coincidió en señalar que la solución de desviar el ‘comercio atípico’ hacia Barrio Chino es “inviable”.
“Nos es normal que adopten esta solución sin haber habilitado otro paso”, señaló Abdeselam.
El problema, según explicó a El Faro, empieza en el hecho de que Marruecos penaliza las exportaciones procedentes de Melilla porque no reconoce a la ciudad autónoma como territorio Schengen y le aplica aranceles aduaneros como si se tratara de un tercer país.
“Si la mercancía viene de Málaga y pasa a Marruecos, paga un 20% de impuestos, pero si es de Melilla paga el 80%. Por eso hay ‘comercio atípico’ entre Melilla y Marruecos”, recalcó Abdeselam.
Por otra parte, el presidente de la Asociación de Comerciantes de Melilla (Acome), Enrique Alcoba, aseguró este martes a El Faro que por Beni Enzar se permitirá el paso de mercancía “documentada”. Este punto no lo entiende Abdelkader Abdeselam. “¿Qué tipo de impuesto tiene que pagar la persona que compre nuestra mercancía? ¿A quién se la paga, a España o a Marruecos? ¿Y qué pasa con el impuesto que pagamos nosotros cuando la mercancía entra en el puerto? ¿Como es para la exportación nos los van a devolver?”, subrayó ayer a este periódico hecho un mar de dudas.
El portavoz de los comerciantes matiza:“No queremos echar un pulso”
Rectificar es de sabios y ayer lo hizo el portavoz de los comerciantes de la frontera, Abdelkader Abdeselam, quiso ayer matizar las declaraciones hechas el pasado martes a El Faro, cuando advertía de que los empresarios de la zona de Beni Enzar iban a cerrar sus negocios para ver quién ganaba el pulso (del desvío de mercancías al paso de barrio Chino). Ayer admitía a este periódico que estaba fuera de Melilla cuando hizo esas declaraciones y que en ese momento se dejó llevar por el enfado que le produjo el efecto que está teniendo sobre los negocios de la zona la decisión de la Delegación del Gobierno de no dejar pasar mercancías por el principal paso fronterizo de la ciudad. “Nosotros no somos nadie para echar un pulso con nadie y menos con el Estado”, apuntó ayer a este diario.
Abdeselam añadió además que no quiso decir lo que dijo, porque él tiene claro que los empresarios están para otra cosa. Una de ellas, insistió, es “intentar que su negocio funcione. Queremos seguir haciendo nuestro trabajo”. El también vocal de la Asociación de Comerciantes de la ciudad cree que Delegación del Gobierno debió contar con los afectados antes de desviar el contrabando hacia Barrio Chino.
¿Qué pasa?
Desvían el comercio atípico hacia Barrio Chino
Comerciantes de Beni Enzar están registrando pérdidas porque no se permite la entrada de mercancías por el principal paso fronterizo de la ciudad. La Delegación del Gobierno dice que no habrá marcha atrás y que el ‘comercio atípico’ se va a Barrio Chino.
¿Qué harán?
Los empresarios van a pedir cita con El Barkani
Propietarios de tiendas ‘al por mayor’ de la frontera pedirán una reunión con El Barkani para que les explique el desvío del contrabando a Barrio Chino.
¿Cuándo se decidió?
Ayer, en una reunión
Los empresarios se reunieron ayer y creen que desviar toda la mercancía por Barrio Chino “es inviable”.