La cooperativa se ve obligada a incrementar las tarifas para hacer frente a los costes del servicio l Otra posibilidad es que la Ciudad Autónoma se haga cargo de las pérdidas mediante una subvención.
La COA está meditando seriamente incrementar el precio de sus billetes para poder hacer frente a los costes del servicio, según informó en la jornada de ayer el portavoz de la cooperativa, Iván Septiem, a El Faro. Factores como el encarecimiento del combustible obligan a la COA a tomar una medida de este tipo y hacen que el aumento de tarifas sea necesario. Subir el precio del billete es una de las posibilidades que se está barajando, pero no la única, pues la Ciudad Autónoma podría conceder una subvención a la cooperativa para compensar las pérdidas.
Septiem explicó que todavía no hay nada decidido y es poco probable que se tome una determinación hasta agosto. Lo que sí es seguro es que la COA solicitará a la Ciudad Autónoma el incremento de las tarifas. A partir de ese punto, será la administración local que tenga la última palabra. “Históricamente, cada vez que el servicio se encarece, repercute en los clientes”, recordó el portavoz de la COA.
La cooperativa se encuentra actualmente analizando el impacto que tendría subir el precio de los billetes, que actualmente cuestan 85 céntimos de euro el sencillo y 75 el reducido. Lo que es casi seguro es que se perderían clientes de forma inmediata, pero la COA no tiene opción si quiere continuar ofreciendo servicio a los melillenses. El hipotético aumento de los pasajes sería de entre 10 y 20 céntimos, aproximadamente. “No hay nada cerrado. De momento estamos evaluando la situación y cómo afectaría esto a los clientes”, insistió Septiem.
La última subida, en 2012
Hay que recordar que el último incremento de tarifas se produjo en el año 2012. En aquel entonces, el precio aumentó en 10 céntimos de euros, pasando a los actuales 85.
La decisión no gustó al principal grupo de la oposición, Coalición por Melilla (CpM), que criticó que el encarecimiento afectaría principalmente a las capas sociales más desfavorecidas de la ciudad, pues según los cepemistas éstas son las principales usuarias del servicio de transporte urbano.
Sea cual sea la decisión de la Ciudad Autónoma, el incremento de las tarifas no verá luz verde de forma definitiva hasta la recta final del presente ejercicio. La idea de la COA es presentar su propuesta en agosto para que comience a debatirse antes de que concluya el verano.
Según los cánones habituales, la propuesta será llevada a la Comisión de Economía y Hacienda y más tarde al Pleno de la Asamblea para su debate entre todos los grupos políticos.
Con el agua al cuello
Por otro lado, Septiem recalcó que la cooperativa sigue teniendo problemas económicos, sobre todo en lo que respecta a la adquisición de combustible.
“La semana pasada la Ciudad Autónoma ingresó 250.000 euros de los 500.000 que tenemos que recibir este año. Nos quedaba sólo un día para que se nos acabara el combustible. Seguimos a flote, pero vamos al límite”, aseveró. “La situación resulta más que preocupante”.
En la misma línea, recalcó que estos problemas están afectando principalmente a los propios trabajadores de la cooperativa, que el pasado mes de mayo no pudieron recibir su salario hasta el día 18. “No podemos seguir de esta manera. Estamos por hundirnos y ya estamos tragando agua”, concluyó Septiem.