El Gobierno local considera que habría que modificar la fiscalidad en Melilla con el fin de que la integración no supusiera un perjuicio a la economía local.
El Gobierno local es favorable a la integración de Melilla en la Unión Aduanera, según confirmó el portavoz del Ejecutivo, Daniel Conesa, pero con matices, pues apuestan por el mantenimiento de un régimen especial en materia fiscal, según concretó.
En este sentido, aunque la Ciudad Autónoma no ha realizado ningún estudio preciso sobre esta cuestión si es cierto que la Autoridad Portuaria encargó un informe a una consultora en la península para analizar el impacto que tendría la entrada de Melilla en la Unión Aduanera. Pese a ello, este estudio no se ha hecho público aunque Conesa matizó que sí tenían conocimiento en el Gobierno local además de otros informes que no precisó.
“Casi todos los datos apuntan a que hay que plantear la integración”, afirmó el portavoz del Gobierno y recordó que esta cuestión había que hablarla con el Ejecutivo ceutí, pues el ingreso debería hacerse de común acuerdo entre las dos ciudades.
Precisamente, el Gobierno de la ciudad caballa también ha confirmado su intención de defender el ingreso en la Unión Aduanera como mejor opción para hacer frente al desrame arancelario que se producirá entre la Unión Europea y Marruecos a partir del año 2012.
Conesa comentó que el ingreso podría beneficiar algunos sectores productivos de Melilla aunque también podría perjudicar a otros, con lo cual matizó que era una cuestión que había que debatir en la ciudad con todos los sectores sociales y empresariales, en particular este segundo, más interesado en la medida en que constituyen el sector productivo local.
De este modo, el portavoz del Gobierno puso como ejemplo la desaparición del Impuesto sobre la Producción los Servicios y la Importación (IPSI), una medida inevitable ya que habría que adoptar el IVA o bien otra forma de fiscalidad.
Por ello desde la Ciudad Autónoma proponen un régimen fiscal especial en Melilla aunque señaló que el Gobierno socialista no parece estar por la labor de realizar ningún paso en esta dirección, pues son otros los intereses que maneja en este momento, según reseñó.
“Es una decisión trascendental”, comentó y recordó que el régimen fiscal especial era el aspecto más importante en la medida en que podía suplir algunos de los problemas que inevitablemente se generarán en Melilla en el momento de suprimir el régimen actual.
Conesa remarcó que lo ideal sería obtener una situación parecida a la que posee Canarias en estos momentos, pues el archipiélago también estaba antes fuera de la Unión Aduanera y más tarde decidió ingresar. Así, Canarias goza de un impuesto indirecto especial, algo que debería conseguir también Melilla y Ceuta.
En cualquier caso, Conesa matizó que el ingreso tampoco tendría por qué afectar a la pretensión de la ciudad de lograr un régimen parecido al de las regiones ultraperiféricas en el marco de la UE, algo por lo que lleva luchando desde hace varios años en diversos foros de la UE y también ante el Ejecutivo central.
“A medio y largo plazo es lo que debería hacer”, afirmó Conesa con relación a la integración aunque remarcó que es un recorrido muy largo en la medida en que tendría que hacer la petición el Ejecutivo central a las Instituciones Europeas y habría que modificar el tratado de adhesión de España, algo que costaría algunos años. Por eso explicó que habría que llevar a cabo una serie de negociaciones, primero con Ceuta y luego con el Estado.