El Ministerio del Interior ha reiterado este miércoles "su más firme respaldo" a la actuación de la Guardia Civil el pasado 24 de junio en el salto masivo de la valla de Melilla en el que murieron al menos 23 migrantes, y ha remarcado que actuó "de forma proporcional, ajustada a la legalidad y firme" ante un intento de asalto violento a integridad territorial de España.
Lo ha hecho tras la publicación de un reportaje de la BBC sobre lo ocurrido en la frontera entre Melilla y Nador en el que la cadena británica asegura que la Policía española vio y no impidió que decenas de migrantes murieran en el perímetro fronterizo.
Ya el pasado 14 de octubre el Defensor del Pueblo consideró en las primeras conclusiones de su investigación que no se respetaron las "garantías legales nacionales e internacionales" al rechazarse en frontera a 470 personas durante el intento de salto en la valla de Melilla.
Fuentes del departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska creen que es "decepcionante y sorprendente" que se hagan acusaciones "de gran gravedad sin el sustento de ninguna prueba" y subrayan que "absolutamente nadie, ni la Guardia Civil, ni la Gendarmería, ni la Fiscalía General del Estado, ni el Defensor del Pueblo ni las autoridades marroquíes sostienen que las muertes tuvieron lugar en territorio nacional".
Desde Interior señalan que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado seguirán defendiendo las fronteras de España "con la misma profesionalidad, ejemplaridad y sujeción a la legalidad".
Por su parte, Jucil, la asociación profesional mayoritaria entre los guardias civiles, recuerda que el uso de cámaras personales facilitaría "saber la verdad" en situaciones como la vivida en el salto a la valla de Melilla el pasado 24 de junio y reclama que se facilite a los agentes llevarlas durante sus intervenciones.
"Es una fórmula eficaz para facilitar a los jueces y a la sociedad el conocimiento de la verdad", añade.