El presidente del PP de Melilla, Juan José Imbroda, ha asegurado que cuando se recuperen las conexiones de barco y avión habrá que ver qué medidas se implantan de seguridad y que éstas no repercutan en un mayor coste de los billetes para los melillenses. En este sentido, remarcó que el Gobierno central tendrá que trabajar para que haya medidas especiales y evitar las subidas de los precios.
Pero a la hora de indicar si se tiene o no que abrir Melilla a la península, subrayó que hay que escuchar a los expertos porque añade que no se puede volver a pasar por una situación como la actual con 22.000 fallecidos por COVID-19. En este mismo sentido se pronunció ayer el consejero de Políticas Sociales, que gestiona Salud Pública, Mohamed Mohamed Mohand, que aseveró que la condición de isla que ha tenido Melilla con el cierre de la frontera con Marruecos y también el cese de las conexiones aéreas y las limitaciones de viajes en barco en temas muy puntuales es lo que ha permitido mantener el control de los contagios. Es más apuntaba a modo de ejemplo que si los melillenses querían bañarse en la playa este verano debía de seguir así.
Imbroda respaldó de cierta forma la opinión de Mohamed Mohand indicando que si es preciso ir menos este año a la playa para poder viajar al próximo año habrá que hacerlo. Aseveró que es mejor seguir tomando esas medidas de precaución para lograr más adelante poder viajar con tranquilidad.
En cuanto a cómo se podrá viajar, el presidente del PP subrayó que tiene que ser el Estado el que determine esto, pero reconoció la complicación de los melillenses en viajar en avión. Afirmó que si hay que guardar distancias entre pasajeros, en los aviones que operan con Melilla, es difícil y eso puede ocasiones o sobrecostes en los billetes o que las compañías no quieran volar porque no cubren sus gastos.
En relación al contrato marítimo, lamentó que se esté trabajando aún en un nuevo pliego cuando se acaba la prórroga el 1 de mayo. Aseveró que el Gobierno central deberá dar una salida a esto porque el 2 de mayo no habrá obligación de servicio público con Melilla y las compañías marítimas pueden dejar de querer operar en Melilla.