Previstas para hoy, con el delegado para abordar los problemas de la Cañada, y en Málaga, con el Gobierno ceutí, para hablar de asuntos económicos, se postergan sin fecha a la vista. Tanto la reunión que iban a mantener hoy en Málaga los Gobiernos de Melilla y Ceuta para abordar problemas comunes, como la prevista para esta mañana entre el presidente de la Ciudad y el delegado del Gobierno, han quedado aplazadas hasta una nueva fecha, aún sin determinar.
Según informaron ayer fuentes del Ejecutivo melillense, el encuentro se ha suspendido debido a la imposibilidad de viajar "por motivos personales" del presidente de Melilla, Juan José Imbroda.
Imbroda se iba a reunir con el presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas, para adoptar medidas y posicionamientos para temas de interés para ambas ciudades, sobre todo de índole económica.
Entre los aspectos a tratar figuraba la situación de las dos ciudades en el seno de la Unión Europea y la necesidad de conseguir un trato específico por parte de la UE; la reforma del Régimen Económico y Fiscal y las bonificaciones a las cuotas patronales de la Seguridad Social que Ceuta aspira a consensuar con el PSOE, para que se aumenten del 40% actual al 50%, aunque sin hacerlas extensivas a todos los sectores económicos como, en principio, pretendían los populares.
Por otro lado, la reunión entre Escobar e Imbroda, que ya fue aplazada del viernes a hoy lunes, ha vuelto a quedar suspendida por los mismos motivos personales que han terminado por alterar toda la agenda del presidente de la Ciudad desde este último fin de semana.
Escobar e Imbroda iban a reunirse para abordar los problemas de los barrios llamados marginales, en los que viven mayoritariamente melillenses de origen bereber y que hace dos semanas protagonizaron distintas revueltas en demanda de trabajo, tras conocerse la lista de preseleccionados de los nuevos Planes de Empleo, por los que se contratará a 1.300 melillenses del total de 10.664 inscritos actualmente en las listas del Servicio Publico de Empleo Estatal de Melilla.