Un hombre de mediana edad (F.M.M.) y en tercer grado penitenciario después de haber sido condenado por un Juzgado de Málaga a cuatro años de prisión, fue el preso que este Jueves Santo ha liberado Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli. La cofradía, junto al Voluntariado Cristiano de Prisiones, lo tendrá bajo su tutela durante un año. Ambas entidades se encargarán de darle apoyo moral y de procurar su reinserción en la sociedad en la medida de sus posibilidades.
El acto de liberación tuvo lugar alrededor de las diez y media de la noche en la tribunal de la Carrera Oficial, frente al Sagrado Corazón de Jesús, después de la secretaria del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria diera lectura al auto por el que F.M.M. queda en libertad. El preso decidió por su propia voluntad procesionar con la cofradía hasta la recogida de sus sagrados titulares, ya en la madrugada.
Liberar un preso es una prerrogativa de esta hermandad, que se viene cumpliendo desde 2001 con el ya conocido parón obligado de la pandemia. Este año se ha cumplido la vigésimo segundo aniversario de la liberación.
La hermandad del Cautivo inició en 1999 los trámites para poder responsabilizarse de la liberación de un preso cada Semana Santa en Melilla. Fue el magistrado-juez de Vigilancia Penitenciaria Juan Rafael Benítez Yébenes quien dio forma al proyecto.
Fue bajo el reinado de Carlos III cuando se produjo una gran epidemia de peste. Nadie en la Semana Santa de entonces quiso salir a la calle para llevar los pasos. Solo los presos tuvieron la valentía de llevar la imagen de Jesús "El Rico" por las calles para cumplir con su estación de penitencia. Cuando concluyeron, volvieron a la cárcel por su propio pie.
Desde entonces, y gracias a una pragmática del citado monarca, Jesús "El Rico" libera un preso cada Semana Santa, una prerrogativa que a lo largo de los años se fue otorgando a distintas cofradías, incluida la melillense.