Considera que ello ha propiciado este “barullo” con relación a las discusiones que se han producido entre el Ejecutivo y las fuerzas políticas representadas en el Parlamento.
El diputado en el Congreso por Melilla, Antonio Gutiérrez, lamentó ayer la actuación que había tenido el Gobierno central con relación a la crisis del Sahara Occidental, estimando que su intervención se había producido muy tarde, circunstancia que habría propiciado las discusiones con las fuerzas políticas en el Parlamento.
En este sentido, Gutiérrez comentó que el Gobierno central parece que ya ha fijado su posición en este asunto, en particular tras la visita que realizó a España el ministro del Interior marroquí para reunirse con su homólogo, Alfredo Pérez Rubalcaba, pues por el momento parece que el Ejecutivo socialista da por buenas las explicaciones que éste le habría dado.
En cualquier caso, el diputado del PP señaló que hoy comparece la ministra de Asuntos Exteriores en Comisión en el Congreso, momento en el que ésta deberá dar más datos sobre esta crisis así como la posición oficial del Gobierno español que por otra parte, no comparte ninguno de los partidos con representación en la Cámara, como quedó de manifiesto ayer tras la votación de una moción del Senado en este sentido en la que tan sólo se opuso el PSOE.
“No debía haber esperado tanto tiempo en fijar posición”, afirmó el diputado del PP y añadió que “no es de recibo los deslices” que ha cometido la ministra de Asuntos Exteriores a la hora de enfrentarse a este asunto.
Así, en su opinión, esta situación habría generado un “barullo” a pesar de que el PP ofreció al Gobierno su apoyo desde un inicio con el fin de solucionar una crisis que en estos momentos parece desbocada debido a los testimonios contradictorios que se producen entre el Gobierno marroquí y el Frente Polisario.
Gutiérrez considera que esa tardanza del Ejecutivo central no habría hecho sino oscurecer y crear una cierta “opacidad” en las informaciones sobre esta crisis, aspecto que perjudica la versión oficial de los sucesos.
Pese a ello, el diputado del PP recordó que habrá que esperar a escuchar hoy a la ministra para que su formación política pueda fijar una posición clara al respecto.
De momento, Gutiérrez recordó que la posición del Gobierno así como de la oposición es intentar desarrollar unas buenas relaciones de vecindad entre los dos países teniendo en cuenta las diferencias existentes pues en su opinión, España no debe perder la posición de “fortaleza” frente a un país como Marruecos.
“El Gobierno central parece que tiene miedo de condenar la violación de derechos humanos en Marruecos”, declaró y finalizó afirmando que también hay que tener en cuenta los ataques a la libertad de prensa en Marruecos, algo que no es tolerable en una Democracia como España, algo que debía haberse aclarado.