Se llama ‘Locos por los arroces’. Es un grupo e Facebook que, en tan sólo diez meses de existencia, cuenta con más de 108.000 miembros. Y lo mejor de todo es que su fundador es melillense. Se llama Ignacio Martínez Sempere y, según explica, lo integra gente de todo el mundo. La mayoría son españoles, sí, pero también hay personas de países como México, Colombia, Estados Unidos y Cuba, que son los siguientes en número. Y no sólo en América, sino de otros lugares tan exóticos como la India y Tailandia.
Eso sí: salvo que seas invitado por alguien, para entrar has de rellenar un formulario de tres preguntas para demostrar tu gusto por el arroz y el respeto a compañeros y opiniones diversas. Precauciones que vienen de experiencias antiguas, anotó el creador.
La principal característica del grupo -o, mejor, la finalidad máxima- es aportar cualquier creación que tenga que ver con el arroz. Según Ignacio, la interacción es bastante fluida, pues 93.000 personas participan en el grupo con relativa frecuencia. Eso sí, siempre desde el respeto, un requisito imprescindible en el que el creador del grupo puso mucho énfasis. Como muestra de lo bien que funciona, añadió que el siguiente grupo de arroces más numeroso en Facebook tiene 65.000 miembros y lleva ya siete años de existencia.
Hay que apuntar que este melillense es fisioterapeusta, pero la cocina es su gran pasión. Así, en su grupo hay arroces de ahumados, frutos secos, salmorejo, tajín de pollo... Las opciones son casi inagotables. Por ejemplo, menciona uno de morcilla de Burgos, piñones y cebolla y manzana caramelizadas. Además, Ignacio publica diversos tutoriales.
Los delantales
Pero, si hay un aspecto curioso en esta historia, es, sin duda, el de los delantales. Así lo explica el fundador del grupo: “Como la gente está muy implicada, hace tiempo que pedían que hicéramos delantales con el logotipo del grupo. No teníamos logo e hice un concurso para elegirlo. Con el logo elegido y los delantales que quería la gente, pensé en que tuviera algún objetivo solidario”.
Finalmente, eligió la asociación Asociación de padres y madres de niños oncológicos de Granada (AUPA), de niños con cáncer de esa ciudad, donde reside actualmente. Como bien asegura, aunque el grupo es internacional, él estaba buscando, más bien, una asociación pequeña, “algo que se pudiera controlar”, en el sentido de asegurarse de que lo “mucho o poco” que recaudaran iría efectivamente a parar allí.
Además, en opinión de Ignacio, esta asociación “se lo curra un montón” e incluso paga el wifi de la planta de oncología infantil del Hospital Materno de Granada y también dispone de tres plazas de aparcamiento para ceder a pacientes que vengan de otras provincias, como Almería, Jaén o Córdoba). Fuera de estas tres plazas, conceden bonos de ayuda en forma de tarjetas de descuento para el resto de vehículos.
También, según prosiguió relatando Ignacio, ayudan en aquellos aspectos no subvencionados por la Seguridad Social, tales como las pelucas, las pomadas para los niños o las prótesis cuando a alguien se le amputa algún miembro, así como otras ayudas para los niños que componen la asociación.
En reconocimiento a todo ello, el delantal lleva ambos logotipos: el de ‘Locos por los arroces’ y el de AUPA.
Encargos por la ‘web’
Contamos con que el camino hasta llevar a cabo la idea no ha sido fácil, evidentemente. Él no podía comprar los delantales en la China y hacer también una página web para venderlos.
Finalmente, con la inestimable ayuda por parte de otras personas, consiguió que una casa de delantales le diera precio para hacer tiradas de 100. Eso sí, hay que tener en cuenta que hasta que no se agoten las 100 prendas, no se procede a la producción y posterior reparto, porque ese es el número de la tirada que se necesita cada vez.
Hay un vídeo en el que lo epxlica claramente y otro en el que habla de los delantales en sí mismos. Todavía, no, pero a partir de septiembre, se podrá pinchar en la página www.originalpaella.es y realizar en ella el pedido.
El precio del delantal para adultos es de 18,95 euros, mientras que el de niños cuesta un euro menos. también, si uno quiere, lo puede personalizar por otros 2,95 euros. Gastos de envío aparte, evidentemente.
Un euro de cada delantal irá a parar a la asociación AUPA, por lo que es deseable que la iniciativa de los delantales tenga el mayor éxito posible. En este caso, la alegría de los miembros de la página web con su delantal será la alegría de los niños de la asociación.