España es un país cuya mayor parte pertenece al continente europeo, pero con algunos territorios en África, como son Melilla, Ceuta, el peñón de Vélez de la Gomera, las islas Chafarinas, las islas Alhucemas, las islas Canarias e incluso la isla de Alborán, aunque esta pertenezca a la provincia de Almería. Un caso especial es el del Sáhara Occidental.
Sin embargo, y contra lo que se pudiera pensar, España no es un caso único de país con territorios en más de un continente. Sucede también en otros países europeos. En Italia, frente a Túnez, se sitúan Pantelaria y las islas Pelagias, que pertenecen a las provincias sicilianas de Trapani y Agrigento. En Portugal, el archipiélago de Madeira se ubica sobre la placa africana.
Las islas Azores, ubicadas en el océano Atlántico, a 1.500 kilómetros de Europa y a 2.500 kilómetros de América del norte, geológicamente se encuentran en la zona de contacto entre las placas euroasiática y norteamericana. En este sentido, existen otros tres países con territorios en ambos continentes. Dinamarca -que también posee las islas Feroe en Europa- tiene en Groenlandia una isla en América, un caso similar al del Reino Unido con sus territorios de Ultramar. Islandia se encuentra en la zona de contacto entre las placas euroasiática al este y norteamericana al oeste. Por último, los Países Bajos tienen territorios en el mar Caribe como Bonaire, San Eustaquio y Saba que gozan del mismo estatus que cualquier municipio europeo. Además, el Reino de los Países Bajos incluye tres países en América que no forman parte integral de los Países Bajos europeos ni de la Unión Europea (UE), como son Aruba, Curazao y San Martín, en las Antillas holandesas.
También hay varios países que tienen territorios tanto en Europa como en Asia. Con unos límites en ocasiones difusos, tales son los casos de Armenia y Azerbaiyán -ambos con distritos a ambos lados de la cuenca del Cáucaso-, Chipre, Georgia, Grecia, Kazajistán, Rusia y Turquía. En el caso de este último país, se considera que tiene tres provincias en Europa y Çanakkale y Estambul son transcontinentales, ya que tres distritos del primero están en Europa y otros 19 en Asia y 19 distritos de la segunda son europeos y los otros 12, asiáticos.
De la misma forma, algunos países tienen territorios tanto en Asia como en Oceanía. Aunque tradicionalmente se asocia Australia con Oceanía, sus posesiones en el océano Índico -la isla de Navidad las islas Cocos (Keeling)- son asiáticas. En Indonesia -asiática en su mayoría- hay varias partes que se consideran parte de Oceanía. Estas son la isla de Nueva Guinea, las islas Aru y las Molucas, Célebes e islas menores de la Sonda al este de la línea de Wallace. Todas las islas de Japón están en Asia salvo la de Minami Torishima -una isla de Oceanía, aunque administrativamente parte de Tokio- y la subdivisión de la villa de Ogasawara. Por último, Timor Oriental se encuentra dentro de la Wallacea, una zona de transición ecológica entre Asia y Oceanía. Políticamente la isla está dividida en un sector occidental perteneciente a Indonesia y un sector oriental que constituye un estado independiente. Cabe señalar que las Naciones Unidas consideran este país como asiático.
Los Estados Unidos, mayoritariamente norteamericanos, tienen -sin contar a Puerto Rico- la soberanía sobre Hawai, Guam, las islas Marianas del Norte y la Samoa Americana en Oceanía.
Finalmente, hay dos países con territorios tanto en África como en Asia como son Egipto y Yemen.
Noruega y Sudáfrica también pueden ser considerados como países transcontinentales según sus posesiones insulares en un continente distinto.
Este tipo de países, con territorios en más de un continente, como España, se denominan transcontinentales. La mayoría de ellos son bicontinentales, pero hay unos pocos que incluso tienen territorios en tres continentes o más y se conocen como tricontinentales. Lo es, de hecho, Portugal, pues, aunque en su mayoría está en Europa, tiene las islas Madeira en África y las islas Azores como parte de América del norte.
Dos casos especiales
El Reino Unido es un caso singular, pues tiene posesiones en los cinco continentes. A Gran Bretaña, Irlanda del Norte, Gibraltar, Acrotiri y Dhekeila en Europa, se suman las Bermudas en América del Norte; Anguila, las islas Caimán, las islas Turcas y Caicos, las islas Vírgenes y Montserrat en el Caribe; las islas Georgias del Sur y Sandwich del Sur y las islas Malvinas en América del Sur; Santa Elena, Ascensión y Tristán de Acuña en África; el Territorio Británico del Océano Índico en Asia y las islas Pitcairn en Oceanía.
Por último, también lo es Francia, país que, además de su plataforma continental en Europa, tiene departamentos de ultramar en África (Reunión y Mayotte) y en América (Guadalupe y Martinica en las Antillas y la Guayana Francesa en Sudamérica). Estas zonas forman parte de la UE, pero, además, Francia tiene otras posesiones en África, América, Oceanía y la Antártida consideradas colectividades ultramarinas francesas y que no forman parte de Francia como país. Estas son San Pedro y Miguelón y las caribeñas San Bartolomé y San Martín, en América; la Polinesia Fracesa, Wallis y Fortuna y Nueva Caledonia, en Oceanía; y las Tierras Australes y Antárticas Francesas en el océano Índico, que están distribuidas entre Asia, África y la Antártida.
Reclamaciones
Asimismo, Chile incluye territorios en varios continentes, ya que, a su franja americana, se suman la Isla de Pascua y la isla Salas y Gómez en la Polinesia de Oceanía. Además, está pendiente su reclamación del Territorio Chileno Antártico. En ese continente, Chile posee ya 13 establecimientos operativos en forma de cuatro refugios y nueve bases activas.
Igualmente, Argentina reclama su soberanía sobre una parte de la Antártida, donde ya dispone de siete bases científicas que permanecen ocupadas durante todo el año y otras seis que se abren solamente durante el verano austral.