El Observatorio de Ceuta y Melilla se muestra a favor de desplegar Frontex en las dos ciudades “llegado el caso”. En su último informe, este think tank señala que “España debería identificar Ceuta y Melilla como una zona de alto impacto a efectos de flujos migratorios y permitir, llegado el caso, el despliegue de una operación Frontex en la zona”.
Explican que esto último, se rechazó rechazado en su momento tras plantearse su uso en las crisis de Ceuta y Canarias. Sin embargo, piensan que optar por Frontex reforzaría la europeidad de las dos ciudades autónomas, además de dejar patente la respuesta no solo integrada sino igualmente multilateral que requieren estos riesgos para las fronteras exteriores europeas
El Observatorio analiza la seguridad interior y dice que la nueva Estrategia de Seguridad Nacional del Reino de España de 2021 “hace hincapié en la buena amistad con Marruecos y en el respeto de las fronteras mutuas, por lo que es esencial la colaboración”, recalcan.
Según explican, se propone desarrollar un modelo de gestión integral de crisis en el Sistema de Seguridad Nacional, así como un sistema de alerta rápida para hacer frente, por ejemplo, a cualquier amenaza a la seguridad; en este punto, el Observatorio señala los flujos migratorios irregulares.
“La única referencia en este contexto a Ceuta y Melilla, por su localización geográfica en el continente africano y por la especificidad de su frontera española y europea, es el hecho de proponerse la elaboración de un Plan Integral de Seguridad para ambas ciudades autónomas”, apuntan.
Recuerdan que en un Plan anterior de septiembre de 2005, la acción principal que se llevó a cabo fue elevar las vallas de Ceuta y Melilla de 3 a 6 metros a efectos de reducir los continuos intentos de saltar por parte de inmigrantes subsaharianos.
Es por ello que piden más ambición en el nuevo plan de seguridad. “En nuestra opinión, y atendiendo al texto de la Estrategia de Seguridad Nacional, el nuevo Plan debería ser más ambicioso, integrado y, sobre todo, con una dimensión europea en el ámbito del control y vigilancia de las fronteras exteriores. Se parte que la Estrategia incide en la necesidad de planes específicos de actuación contra el crimen organizado, contando además con la participación de los Estados de origen y tránsito de la inmigración irregular, especialmente en la zona del Estrecho de Gibraltar”.
Es por ello que creen que la dimensión europea debería venir de la aplicación en Ceuta y Melilla de la gestión integrada de fronteras exteriores y a partir del Reglamento de la Guardia Europea de Fronteras y Costas (Frontex). En concreto, el Plan debería conllevar a su vez un plan operativo sobre fronteras exteriores en coordinación con Frontex, remarcando la categoría de nivel elevado / crítico en el caso de Ceuta y Melilla, así como un plan de contingencia y de desarrollo de capacidades.
Apuntan a que con todo, una mayor implicación europea a través de los instrumentos ya adoptados permitiría una nueva dimensión en cuanto al control y vigilancia de las fronteras de Ceuta y Melilla, que son, además, fronteras exteriores europeas.
Propuestas
El Observatorio elabora una serie de propuestas en maeria de seguridad en su informe. En primer lugar, señalan que la Estrategia de Seguridad Nacional del Reino de España debe indicarse claramente la dimensión europea de Ceuta y Melilla, como territorio y frontera exterior.
Ello debe implicar además la expresa mención a estar bajo la cobertura de la cláusula de legítima defensa prevista en el art. 42.7 TUE y frente a cualquier ataque armado del exterior.
En segundo lugar, exponen que en el marco de las nuevas formas de cooperación en el ámbito de la industriade defensa, y por medio de la Cooperación Estructurada Permanente, España debe incidir en aquellos proyectos que puedan tener un importante impacto en la naturaleza europea de Ceuta y Melilla. “Especialmente aquellos relacionados con la vigilancia y protección marítimas y que permitan a ambas ciudades autónomas insistir en su europeidad frente a cualquier amenaza”, apuntan.
Así pues, dicen que el futuro Plan Integral de Seguridad para Ceuta y Melilla debe basarse en la normativa europea en materia de control y vigilancia de fronteras exteriores, en el marco de Frontex. “Ello implica saber cómo actuar ante una situación de crisis, con qué medios se disponen y de qué forma deberá coordinarse con las agencias europeas. Y todo ello, además, deberá reflejarse en la futura Estrategia Nacional de Gestión Integrada de Fronteras”.
Schengen
En el informe señalan que la pertenencia de Ceuta y Melilla al espacio Schengen está claramente influenciada por el régimen fronterizo en ambas ciudades y derivado de Tratados internacionales del siglo XIX, así como las particularidades de sus pasos fronterizos.
Por otra parte, exponen que el régimen de exención de visados con las regiones marroquíes limítrofes, Nador y Tetuán, debería favorecer el desarrollo socioeconómico de la zona en beneficio de ambos países.
Apuntan que las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla poseen unas características geográficas muy particulares, especialmente por cuanto que representan las únicas fronteras terrestres españolas y exteriores europeas con el continente africano. Ello además queda patente en su régimen tanto en la normativa española como europea.
Explican que tras el cierre de las fronteras por la pandemia de COVID-19, a lo que hay que añadir el cierre de la frontera aduanera y más recientemente la crisis migratoria en Ceuta en mayo de 2021, el Gobierno español se ha replanteado la situación de las dos ciudades autónomas en Schengen.
De acuerdo con lo que hemos visto hasta ahora del régimen de exención de visados en las regiones fronterizas, el control de personas se haría realmente en las fronteras aeroportuarias (puerto y helipuerto de Ceuta, y puerto y aeropuerto de Melilla).
Las posibilidades
El Observatorio dice que se podrían plantear dos posibilidades. La primera de ella es renunciar al régimen de exención de visados, lo cual implicaría únicamente derogar la Declaración que se presentó con ocasión de la adhesión a las Comunidades Europeas.
“Entendemos que no es derecho originario y únicamente se llevaría a cabo por un acto unilateral por parte de España”.
La nueva situación, afirman, conllevaría que los controles se realizarían únicamente en las fronteras de Beni Enzar y el Tarajal, exigiéndose en todo caso visado y a todas las personas que lo necesitaran, y eliminándose el resto de pasos fronterizos.
Relatan que en las últimas negociaciones en mayo de 2022, parece que las partes estarían en disposición de derogar estar régimen de exención de visados, al menos en una primera fase de reapertura de las fronteras. En este punto es importante destacar el sector más afectado por la medida, que sería el de los trabajadores fronterizos marroquíes que desarrollan su actividad laboral en Ceuta o Melilla y regresan a Marruecos de forma diaria o semanal.
“Esta medida, por otra parte requeriría un consenso entre todas las fuerzas políticas, pues vendría a endurecer el régimen de cruce fronterizo en las dos ciudades autónomas”, dicen.
“En nuestra opinión, esta opción no sería deseable por varias razones. En primer lugar, la opción de eliminar la exención de visados puede provocar una saturación de los consulados españoles a la hora de facilitar dicho documento, además de crear un importante efecto colateral desde un punto de vista social y económico al reducirse la movilidad entre las regiones limítrofes”, expresan.
En segundo lugar, creen que hay que reducir los pasos fronterizos a uno solo, tanto en Ceuta como en Melilla, crearía en algunos casos y si no se toman las medidas necesarias desde un punto de vista de las infraestructuras y medios disponibles, situaciones de aglomeraciones, haciendo pasar por el mismo punto a trabajadores fronterizos, escolares, turistas, extranjeros, comerciantes, etc.
En tercer lugar, se podría abogar por una reapertura por fases, esto es retomar la situación anterior y ver, poco a poco, qué mejoras se pueden llevar a cabo, basándose en la cooperación entre las autoridades, e incluso buscando la adopción de medidas revolucionarias a medio y largo plazo.
“Con todo, consideramos necesario que, como medida compensatoria en el refuerzo del control fronterizo, se deberían mantener los pasos secundarios, reforzándolos: en Ceuta Benzú, y en Melilla Barrio Chino, Mariguari y Farhana. En todos ellos podrían operarse puntos de control fronterizo lo cual implicaría además mayor dotación de miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad”, afirman.
Pienso que quién no coopera es el Reino de Marruecos, cerrando la frontera al trasperlo del que vivían muchos magrebíes y comerciantes de Ceuta y Melilla.
Con la implantación de Frontex (España no está por la labor), dado que sería personal Frontex quién controlará las fronteras (no todo el personal Frontex es español).
Por mi log veo bien. El futuro de las dos ciudades se ha demostrado que no está cooperando con Moroco y su sultán.
O teta o sopa, yo realmente no comprendo el estudio del Observatorio de Melilla y Ceuta. Se habla de frontera única, pero se recomienda pasos secundarios. Se habla de visado, pero se recomienda no pedirlo para habitantes de Nador y Tetuán. Se habla de habla de espacio Schengen, pero se aplican excepciones. Se habla de enmarcar a las ciudades de Melilla y Ceuta bajo la normativa europea de fronteras de seguridad, con vigilancia de Frontex, pero se estudia un paso más tolerado y controles en los recintos aeroportuarios. No podemos hacer congeturas y divagar en temas de seguridad Nacional. España debe de aplicar la normativa comunitaria en seguridad y control de fronteras, y dejarse de coletillas barriobajeras basadas en arraigos de vecindad, y chantajes oportunistas que lo único que harían sería volver al pasado ,donde el caos fronterizo , la delincuencia y los intentos constantes de manipulación política de Marruecos, eran el día a día de estas dos ciudades españolas. Hay que aplicar una normativa coherente y sería que de seguridad a España y a la CE. y dejarle bien claro a Marruecos que trata con un país soberano al que hay que respetar tanto en sus decisiones como en su integridad territorial.