La dirigente popular, Katty Muriel, señala que lo que debe hacer el delegado del Gobierno es ir a Madrid a buscar más inversiones del Estado para la ciudad.
El PP pidió ayer la dimisión del delegado del Gobierno en Melilla, Gregorio Escobar pues a juicio del partido “es incapaz de asumir sus competencias” en Melilla.
En este sentido, la responsable popular, katty Muriel, denunció ayer “la incompetencia del delegado” en temas como el transporte o el empleo, “que son competencia del Estado”.
Así, lamentó que no estuviera representando los intereses de los melillenses ante el Gobierno central. “No le importa los problemas de Melilla y es una marioneta en manos del PSOE y CpM”, afirmó y añadió que “fruto de ello es el boicot a cualquier proyecto de la Ciudad”.
Muriel remarcó que esa “incompetencia” quedaba plasmada en los problemas sin resolver en Melilla como por ejemplo el empleo. “Desde que Escobar está en la Delegación hemos llegado a cifras record; esta es la herencia que dejará en Melilla”, señaló y rechazó las que a su juicio son palabras “demagógicas” del delegado cuando dijo que el problema del desempleo “es responsabilidad de todos”.
La dirigente popular recordó que la reactivación económica de la ciudad tan sólo vendrá de la inversión pública con lo cual compelió a Escobar a que acudiera a Madrid “a pedir esas inversiones”. Además, le pidió que apoyara el proyecto de ampliación del puerto comercial de Melilla, pues podría ser una cantera de empleo en la ciudad, según mostraban los estudios que se habían realizado para estudiar la viabilidad del proyecto.
En otro orden de cosas, Muriel también hizo referencia a los transportes y matizó que “si el delegado ha sido incapaz de solucionar el coste de la segunda maleta, ¿cómo va a arreglar el problema de la bajada de precio de los billetes?”. De este modo, comentó que ya no podía pedir más paciencia a los melillenses en éste ámbito, a pesar de las reuniones que se habían mantenido con el Ministerio de Fomento y la Comisión creada, pues no había solucionado ninguno de los porblemas del transporte. Muriel añadió otro asunto complicado como era el de la frontera.
La responsable popular comentó que era un caos para los melillenses y lamentó las condiciones en las que trabajaban los agentes de Policía en la zona, pues tenían que hacer frente continuamente a los problemas de violencia, como el sucedido hace dos semanas, en el que dos agentes resultaron heridos, uno por arma blanca y tuvieron que ser hospitalizados.
“Es un caos y así lo entienden los melillenses”, afirmó y recordó que muchas veces eran las asociaciones, como en el caso de los comerciantes, los que debían reunirse con las autoridades marroquíes para intentar solucionar los problemas fronterizos.
Ese fue elcaso de una asociación de comerciantes de Melilla así como la Comisión Islámica, pues fueron sus reuniones las que permitieron ampliar el plazo para la renovación de la carta verde a aquellos vehículos que la tenían caducada.
Finalmente, Muriel señaló que el delegado del Gobierno “no da la cara ante los medios de comunicación y si habla lo hace de forma demagógica”. Así, remarcó que Escobar “vive una realidad distinta a la de los melillenses” y recordó que la criminalidad seguía aumentando en la ciudad, como ponían de manifiesto los datos.