El viceconsejero de Medio Ambiente, Guillermo Merino, afirma que los usuarios tienen una percepción positiva de los servicios a tenor de las encuestas de calidad realizadas.
A pocos días de finalizar la temporada de playas, el viceconsejero de Medio Ambiente, Guillermo Merino, no dudó ayer, en declaraciones a ‘El Faro’ en hacer un balance positivo del desarrollo del Plan de Playas de este año. Así, adelantó que los retos para el próximo proyecto para el litoral melillense de 2012 serán la consolidación y mejora de los servicios que ya se ofrecen así como hacer una apuesta más decidida por la accesibilidad. De hecho este punto, destacó, es uno de los que más cuentan a la hora de conseguir cada año la Bandera Azul así como la calidad de aguas, arena, limpieza y mobiliario urbano, entre otros criterios.
Merino reconoció que actualmente hay seis zonas accesibles en las cuatro playas de la bahía cuando hace siete años únicamente una playa poseía un acceso adaptado a las personas con discapacidad.
“Este objetivo es permanente en la Consejería”, afirmó, por lo que el próximo año se repararán y renovarán gran parte del mobiliario adaptado para este colectivo así como se ampliarán las zonas accesibles. “Está siendo una prioridad para la Consejería el hacer un esfuerzo por ofrecer a los melillenses unas playas en condiciones de calidad”, añadió.
Y es que, según informó, las encuestas de calidad que la Consejería encarga cada año durante la temporada estival reflejan que la mayoría de los usuarios “tienen una percepción muy positiva” de las playas melillenses.
Puntos en contra
Los únicos contratiempos con los que ha tenido que luchar la Consejería este verano, según reconoció el propio viceconsejero, han sido el control de las aguas en la desembocadura del río y que no se ha podido permitir el baño en la playa de Horcas Coloradas. En este sentido, Merino explicó que en el nacimiento del río de Oro “ha debido llover mucho en la pasada temporada”, a tenor de la cantidad de agua que ha llegado a la desembocadura a través de los acuíferos subterráneos.
Por ello, “el trabajo de la Consejería, a diario, se ha centrado en dar salida al agua para que no se estanque y evitar así los malos olores y la proliferación de mosquitos que molestan a los vecinos que viven cerca”. Hecho que ya ocurrió en años anteriores.
Salvo estas dos excepciones, el balance del viceconsejero no puede ser más que positiva, teniendo en cuenta que las playas melillenses reciben cada año a miles de ciudadanos, por lo que, la exigencia de ofrecer unos servicios de calidad es cada vez mayor para mantener la Bandera Azul cada año.
En este sentido, Merino reconoció que, en conversaciones con los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente de la Ciudad Autónoma, “hemos comentado que es difícil incorporar cosas nuevas”.
Por ello, “nos vamos a centrar en la consolidación y estabilización de las que ya tenemos y apostar decididamente por la accesibilidad”, así como de recuperar la playa de Horcas Coloradas, otra de las asignaturas pendientes.
Cabe recordar que las playas de Melilla cuentan con zonas accesibles debidamente señalizadas para personas con discapacidad, y en concreto en la playa de San Lorenzo, se encuentra instalado un sistema adaptado para personas invidentes con gran aceptación.
Desde pasarelas más anchas, reservados a la entrada de la playa y sombrillas especiales para el colectivo en primera línea de playa hasta aseos y lavapiés adaptados son algunos de los servicios con los que cuenta el litoral melillense para que estas personas puedan disfrutar como el resto.
La asignatura pendiente de la playa de Horcas Coloradas
Por otra parte, otro de los puntos negativos del Plan de Playas de este año ha sido para el viceconsejero de Medio Ambiente, Guillermo Merino, la imposibilidad de abrir al público la playa de Horcas Coloradas. Y es que los informes preceptivos de la Dirección General de Costas no han llegado a tiempo a la Ciudad Autónoma para que ésta levantara la prohibición del baño en el litoral norte antes de que acabara el periodo vacacional.
Es por ello que, Merino dijo que la apertura de Horcas y la dotación de esta playa de todos los servicios de los que disfrutan los melillenses en el resto de las zonas de baño será otro de los ejes y apuestas para el Plan de Playas del año 2012. Es la ambición de la Consejería de Medio Ambiente poder abrir esta playa una vez se pueda limpiar debidamente el fondo marino y poder así permitir el baño con todas las garantías de seguridad.