El conjunto azulino cosechó su segunda derrota consecutiva en tan sólo cuatro días y ante los dos equipos del poniente almeriense.
UD Melilla y CD Roquetas se enfrentaron en la matinal de ayer en partido correspondiente a la 17ª jornada del Grupo IV de Segunda División B. Los melillenses afrontaban el partido con la idea de sumar los tres puntos en juego para no descolgarse de los puestos nobles de la tabla y volver a la senda del triunfo tras la derrota cosechada el pasado miércoles ante el otro representante del poniente almeriense: el Polideportivo Ejido. Por otra parte, la escuadra roquetera quería aumentar a siete las jornadas que lleva sin perder. Hecho que consiguió debido, sobre todo, al orden defensivo del cuadro que dirige Gabriel Florit, que aprovechó una de las pocas ocasiones de peligro que creó.
A pesar de la derrota y de haber sumado tan sólo un punto de los últimos nueve disputados, la UD Melilla sigue con sus opciones intactas y, después de los resultados del fin de semana, se sitúa en la sexta posición de la clasificación a tres puntos de la AD Ceuta, cuarto clasificado y próximo rival de los azulinos.
El partido comenzó con el equipo almeriense controlando y dominando la situación ante un Melilla que saltó algo aturdido al terreno de juego. Así, a los dos minutos de juego, Pablo García recorrió la banda derecha y centró al área local teniendo que despejar con apuros el meta local. Cinco minutos después Dorronsoro no controló el cuero en el borde del área y Javicho cedió sobre Marc que envió alto con el portal azulino totalmente desguarnecido.
El primer acercamiento con cierto peligro de los unionistas se produjo en el minuto once de juego y a balón parado. David Vázquez recibió de Enguix y su centro al segundo palo lo despejó de puños el cancerbero visitante.
Pero el Roquetas seguía sin perder la compostura y Javicho, muy activo toda la mañana, penetró por banda izquierda y centró al segundo palo donde Quique, totalmente solo, cabeceó al fondo de la red sin que Dorronsoro pudiera hacer nada por evitar el tanto. El crono marcaba el minuto 13 de juego y el 0-1 subía al marcador del Municipal.
Poco a poco la UD Melilla fue entrando en el partido y pasado el primer cuarto de hora, los azulinos se hicieron con las riendas del choque. Así, en el minuto 21 de juego, Vázquez realizó un pase interior sobre Nacho Aznar que fue derribado dentro del área por Servando. Penalti claro y sin discusión que se encargó de ejecutar Andrés Ramos pero Jonathan, que estuvo muy inspirado en todas sus acciones, adivinó la trayectoria del lanzamiento y despejó con la rodilla el cuero, evitando el tanto del empate.
Los de García Tébar no desistían en su empeño y buscaban la igualada pero sin acierto. Guille Roldán primero y después Mahanán pisaron área visitante. El zaguero local realizó el llamado pase de la muerte y el remate de Nacho Aznar se estrelló en el cuerpo de un defensor evitando una clara ocasión de gol. Más tarde, pasada la media hora de partido, Guille Roldán y Víctor Bravo lo intentaron desde lejos pero sus disparos salieron muy desviados. A falta de tres minutos para el descanso, Víctor Bravo centró desde la izquierda y Nacho Aznar cabeceó al fondo del portal roquetero pero el extremeño Santos Caballero anuló el gol por fuera de juego a instancias de su asistente. Sin tiempo para más, ambos equipos tomaron el camino de los vestuarios con ventaja visitante.
El segundo acto fue un querer y no poder por parte del conjunto azulino que dominó de manera absoluta el período pero que se estrelló una y otra vez ante el ordenado entramado defensivo dispuesto por Florit y cuando lograba superar la oposición visitante, ahí estaba Jonathan para solventar el peligro con destacadas intervenciones.
Nada más comenzar el segundo tiempo, otro pase interior de David Vázquez propició una clara ocasión de Andrés Ramos pero el delantero azulino se escoró demasiado y envió al lateral de la red. El Melilla no tenía su día y se le acumulaban los problemas ya que Vázquez solicitaba el cambio por lesión y poco después fue sustituido por Chota. En el 48, un desajuste defensivo de la zaga visitante propició que Nacho Aznar se encontrase sólo ante el meta almeriense al que dribló pero el punta melillense se entretuvo demasiado y con la portería vacía optó por pasar sobre Andrés Ramos que disparó algo desviado. Con Chota en el campo, el Melilla dispuso toda su artillería en busca de la igualada pero esta seguía sin llegar.
Gabriel Florit movió ficha y refrescó su centro del campo con un doble cambio dando entrada a Raúl y Aitor por Manolo y Miro. Pero el conjunto de García Tébar, a pesar de no estar al nivel de partidos anteriores, seguía siendo dueño absoluto del juego. Así, el acoso sobre el área visitante se intensificó y Chota dispuso de una clara ocasión pero su disparó lo envió a córner Jonathan de manera poco ortodoxa. Los únicos acercamientos sobre el portal melillense de los almerienses en la segunda parte se produjeron en los minutos 63 y 69. Primero en un contraataque llevado por Marc que centró al segundo palo y el remate de Javicho lo despejó la defensa azulina y segundo en un tiro lejano de Javicho que atajó Dorronsoro sin problemas.
A falta de diez para el final, Sufian, que sustituyó a Castells, penetró en área rival y cedió sobre Ramos pero su disparo, que se colaba con un obús por la escuadra izquierda del portal rojillo, fue desviado a saque de esquina por Jonathan en una magnífica intervención evitando, de nuevo, un gol seguro. En el 87 Chota es derribado al borde del área visitante y el lanzamiento directo de Bravo salió rozando la escuadra derecha del Roquetas. Dos minutos más tarde, Sufian realizó una jugada individual dentro del área que terminó con pase a Guille Roldán que remató flojo a las manos de Jonathan. En el último minuto de juego Andrés Ramos cabeceó sobre el marco contrario pero Jonathan, una vez más, abortó el peligro despejando a córner. Ya en el tiempo añadido y en el último suspiro del partido Nacho Aznar totalmente sólo y con todo a su favor, cabeceó flojo a las manos del inspirado Jonathan.
Fue la última ocasión de un choque en el que la UD Melilla dejó escapar tres puntos muy importantes y la posibilidad de recuperar la cuarta plaza perdida hace cuatro días en el Santo Domingo ejidense donde ayer también cayó el Ceuta.