El director del Tribunal Rabínico de Europa, Dayan Elimelech Vanzetta, se encuentra de visita unos días en Melilla preparando, con la comunidad local, el año nuevo judío, que se celebrará entre el domingo 25 y el martes 27 de septiembre. En concreto, ha dicho, son cuatro días “conviviendo y de preparación, compartiendo momentos de oración” y realizando sus “plegarias por el bienestar de la comunidad judía y de la ciudad de Melilla”.
Para el rabino, según ha afirmado, es “un honor” estar en la ciudad. Vanzetta ha elogiado a los judíos de Melilla, que están “orgullosos de su fe, de su ciudad y de sus orígenes”, por lo que aceptó su invitación “con mucha alegría”. Para Vanzetta, quien llegó el jueves a Melilla, el viaje fue “largo”, pero mereció “la pena”, porque “vale la pena visitar y conocer Melilla”.
El rabino ha estado este jueves en el Palacio de la Asamblea para reunirse con el presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, a quien ha dado las gracias públicamente “por lo que está haciendo por la comunidad judía y por todas las comunidades residentes en este hermoso lugar”. Así, le ha deseado “que el todopoderoso bendiga la labor de sus manos, esta hermosa ciudad, a todos sus residentes y a todas las comunidades que tienen el privilegio de llamarla su casa”.
Por su parte, De Castro ha comentado que, para él, también es “un honor recibir a alguien tan importante como él y un honor y una obligación atender a la comunidad judía en Melilla”, que es “parte muy importante” tanto de la historia de España como de Melilla, ya que, según ha dicho, es la segunda comunidad en antigüedad en la ciudad, sólo por detrás de la cristiana.
Visita a la Delegación
Por su parte, la Delegada del Gobierno, Sabrina Moh, también ha recibido al Dayan Elimelech Vanzetta.
Vanzetta ha acudido a la Delegación acompañado del presidente y vicepresidente de la Comunidad Israelita de Melilla, Morderjay Guahnich y Salvador Chocrón, respectivamente, y del rabino de la comunidad melillense, Aaron Perets.
En el encuentro se han puesto en valor el respeto y convivencia que se da en Melilla entre las diferentes comunidades religiosas. De hecho, Moh ha dejado claro que en la ciudad no solo hay que poner en valor la multiculturalidad, sino interculturalidad existente, algo que se vive en Melilla desde las más cortas edades.
Además, también se ha abordado la necesidad de salvaguardar la convivencia y la concordia desde todos los ámbitos frente a los mensajes de odio que están surgiendo en determinados espacios. Algo en lo que Moh ha dejado claro que va a seguir trabajando tanto desde la Delegación del Gobierno como desde sus organismos dependientes.
Por último, el Dayan ha recitado una oración por la Delegada, por las instituciones y por todos los melillenses y ha pedido que la ciudad siga siendo un ejemplo mundial de convivencia y respeto.