El joven melillense, Javier Cecilio, es un deportista profesional que se dedica al K-1 y que el domingo 26 de marzo compitió en Japón, contra el nipón Kazuki Osaki, en 'El Dorado 2023', de donde ha vuelto sin el premio final de la victoria.
De esta forma, el melillense no pudo salir vencedor del combate porque el árbitro del encuentro decretó K.O. técnico debido a un fuerte golpe que le propició el nipón Kazuki Osaki al final del primer asalto.
El Faro pudo conversar con Javier Cecilio para que nos contase cuáles fueron las sensaciones que tuvo durante el combate. Según asegura el deportista, se encontró muy cómodo desde el primer momento en el que comenzó el combate y las sensaciones eran cada vez mejoras una vez iban pasando los minutos.
Finalmente, un movimiento inesperado del nipón acabó con las esperanzas que tenía depositadas Cecilio en este combate. "No me esperaba recibir ese golpe en la cabeza, fue un contratiempo muy grande porque creo que hubiera ganado el combate si hubiera seguido la línea del principio, pero al final no pudo ser", explica el melillense.
A pesar de ese sabor agridulce, el joven confiesa que "la experiencia ha sido increíble y que tiene más ganas que nunca de seguir combatiendo y demostrando todo lo que puede hacer".
Por otro lado, 'El Dorado', combate que disputó el melillense, es una competición organizada por una de las mayores promotoras a nivel mundial de deportes de contacto como es 'Rise Extreme Fight Game'.
El Faro pudo entrevistar al deportista melillense antes del encuentro, cuando se encontraba en Madrid ultimando su preparación para el combate y su viaje hacía el país nipón, para conocer de primera mano a Cecilio, cómo ha sido su trayectoria hasta llegar aquí y cuáles eran sus expectativas de cara a la pelea.
En primer lugar, explícanos, ¿Qué es el K-1 y en qué consiste?
El K-1 es un deporte de comporte y disciplina deportiva creado precisamente en Japón, siendo éste el país donde el K-1 tiene su mayor difusión e importancia. Asimismo, el K-1 combina técnicas que provienen de diversos deportes y artes marciales como Muay Thai, Karate, Taekwondo, Kickboxing, Savate o Boxeo, entre otros.
¿Cómo conociste el K-1, cómo fueron tus inicios en este mundo y si siempre tuviste claro que te querías dedicar a ello?
El primer deporte de contacto o de artes marciales que conocí fue el karate, ya que a mi padre siempre le ha gustado mucho el karate y él me lo ha inculcado desde pequeño.
Más tarde conocí el K-1 a través de un amigo mío, que se llama Mohamed, que fue quien me llevó a la escuela de uno de los peleadores más influyentes de la ciudad y de toda España como es Ali Bonilla, más conocido como el “Chicho”.
Desde que empecé a competir si que se me abrió la mentalidad poco a poco de poder dedicarme a ello en un futuro muy lejano porque se que hace falta mucho recorrido, pero cada vez esa posibilidad está más cerca afortunadamente.
¿Has practicado algún deporte de contacto o alguna arte marcial antes de dedicarte al K-1?
Sí, empecé a los 13-14 años haciendo MMA, que son varias artes marciales mixtas juntas, y desde ahí comencé a coger algunas nociones de lo que eran los deportes de contacto. De hecho me gustó tanto que competí dos veces en competiciones de MMA a nivel amateur.
¿El K-1 ha pasado a ser el único trabajo en tu vida a día de hoy o lo compaginas con algo más? ¿Cuántas horas le dedicas a esto?
Pues el K-1 no es mi único trabajo ahora mismo, ya que actualmente en España es muy complicado poder ganarse la vida solo con este deporte. De hecho este deporte lo he estado compaginando hasta ahora con el estudio y con otros trabajos que he tenido.
Desde hace algún tiempo, mi entrenador personal es el que me hace la preparación y según eso le dedico todas las horas que me haya programado. No tengo un horario fijo sinceramente, pero para llegar a ser un deportista profesional hay que dedicarle muchas horas porque el nivel es muy alto.
Cuéntame un poco sobre la competición en la que vas a participar. ¿Cómo te has clasificado para ella? ¿Qué significaría ganar la competición o quedar entre los tres primeros?
En esta ocasión, no se trata de una competición con clasificatorias, sino que entras a raíz de una invitación para poder pelear en un único combate a nivel profesional y sin protecciones.
En este caso, la competición ha sido creada por una de las promotoras de deportes de contacto a nivel profesional más importantes a nivel mundial, con sede en Japón, llamada 'Rise Extreme Fight Game'.
Si consigo ganar la pelea significaría sería un enorme logro para mí y se me permitiría poder tener un contrato más de otra pelea con esta gran promotora de eventos de deportes de contacto. Por lo que si gano de forma escalonada seguiré yendo a diferentes peleas creadas por esta entidad y poder tener la posibilidad de luchar por el título en algún momento.
¿Cuáles son tus expectativas para la competición de este año? ¿Cómo fue el torneo pasado y te has propuesto una meta mayor? En caso de que el año pasado compitieses en este torneo
Las expectativas para este año son muy claras. Mi intención es poder competir en el mayor número de peleas posibles para tener una mayor experiencia e ir ascendiendo cada vez más.
Ahora que estoy teniendo la suerte de poder adentrarme en las grandes ligas de los deportes de contacto tengo que aprovechar la oportunidad al máximo y seguir con mi línea de trabajo porque la competitividad es cada vez más alta.
¿Qué significa para ti el deporte y en especial el K-1?
Para mí el deporte es algo que todo el mundo necesita tener para poder tener un bienestar en su vida, sin importar el deporte que practiques, porque realmente eso es secundario.
Por otro lado, el K-1 para mi ha sido y es un deporte que me ha dado muchos valores, y que cambió bastante mi estilo de vida. Me siento muy feliz de haber conocido esta disciplina y poder dedicarme a ello de esta forma semi-profesional como lo hago ahora, es un sueño para mí.
¿Qué supone para un chico tan joven como tú representar a Melilla por todo el mundo en este deporte?
Me encanta, pero realmente no me supone ninguna presión. Por ello, me llena de orgullo poder representar a mis compañeros del gimnasio, que me han ayudado cada día para estar donde estoy, y a todos los melillenses que siempre apoyan a los deportistas locales, independientemente de el deporte que se practique.