El Instituto de Educación Secundaria Leopoldo Queipo se convirtió en el epicentro de una interesante reflexión sobre el cuidado. Un nutrido grupo de alumnos participó en un café filosófico, iniciativa enmarcada dentro de las Olimpiadas de Filosofía y organizado por la profesora Alba Velázquez del IES Juan Antonio Fernández.
El encuentro contó con la participación de Elsa Almendros y Óscar Huang, quienes introdujeron el tema de los cuidados a partir de la obra de Carol Gilligan. Los ponentes destacaron la importancia de analizar cómo ejercemos el cuidado no solo hacia nosotros mismos, sino también hacia los demás y el entorno que nos rodea.
Almendros destacó la relevancia de abordar cuestiones como las redes sociales, la amistad, el cuidado del medio ambiente y las relaciones amorosas desde una perspectiva filosófica. "Es un tema que parece pasar desapercibido en nuestro día a día, pero tiene muchísima relevancia en la actualidad", añadió.
Por su parte, Huáng subrayó la importancia de fomentar espacios de reflexión como los cafés filosóficos, especialmente entre los jóvenes.
Para los ponentes, al final, lo más importante de esta iniciativa es que se formula como un tipo de ocio diferente, sobre todo para los más jóvenes, donde se puede hablar con total libertad y reflexionar sobre interesantes temas de actualidad.
La iniciativa ha sido muy bien acogida por el alumnado; tanto que hubo decenas de estudiantes que se quedaron sin poder asistir debido al limitado aforo. “Me ha sorprendido mucho que venga tanta gente”, comentó Alba Velázquez, profesora de filosofía y organizadora del evento. “Parece que el tema está gustando y eso es muy positivo”.
Los cafés filosóficos se han convertido en una herramienta valiosa para complementar el aprendizaje en el aula y fomentar el pensamiento crítico entre los jóvenes. “Tratamos de abordar los temas de una forma menos académica, más cotidiana, para que cualquier persona pueda participar y aportar su punto de vista”, explicó Velázquez.
Con esta iniciativa, se consigue generar un verdadero interés por la filosofía entre los jóvenes melillenses, demostrando que la reflexión y el diálogo son herramientas fundamentales para construir un mundo más justo y sostenible. Es también una oportunidad para que los docentes puedan salirse del currículum académico.