Las medidas que ha tomado el Gobierno de Marruecos en las zonas limítrofes de Melilla han permitido que la frontera de la ciudad esté en un momento de “relativa tranquilidad”, dentro de la situación de alerta en la que lleva desde hace años. Así lo aseguró ayer el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, que explicó de esta forma la ausencia de intentos de entrada de inmigrantes en días. Desde el pasado 19 de septiembre no ha habido ningún salto. Ese día 200 subsaharianos trataron de saltar la valla y lo consiguió una decena.
El delegado del Gobierno señaló que le consta que Marruecos se preocupa por regular los flujos migratorios. Y afirmó que aunque no se estén produciendo saltos la Guardia Civil no deja de vigilar el perímetro fronterizo.
El Barkani informó de que la semana próxima tendrá una reunión en Madrid con el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, para abordar la mejora del perímetro fronterizo. Analizará en este encuentro la idoneidad de mantener la sirga tridimensional, de instalar una malla antitrepa para dificultar la escalada de los inmigrantes o de retirar algunos elementos que “lejos de evitar el salto, lo que hacen es favorecerlo”.
Reunión con la Guardia Civil
El delegado del Gobierno resaltó que la Secretaría de Estado de Seguridad y la Dirección General de la Guardia Civil siguen trabajando “muy directamente” en la mejora del perímetro fronterizo de Melilla, en la que se están estudiando varias posibilidades para impedir que los inmigrantes puedan saltarlo fácilmente.
El Barkani destacó que la única solución para evitar que haya tantas personas al otro lado de la valla queriendo entrar en Melilla es que no salgan de sus países de origen de forma irregular. En este asunto la Unión Europea tiene que implicarse más, aseguró el delegado del Gobierno.
También resaltó el trabajo que varias ONG realizan con estos inmigrantes, atendiendo sus necesidades y ofreciéndoles la ayuda humanitaria que precisan. Y apuntó en muchas ocasiones son los guardia civiles los que muestran su solidaridad con estos inmigrantes y les asisten al entrar en España.
878 inmigrantes en el CETI
Además, explicó que el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) ha logrado reducir algo la presión que presentaba a principios de semana al pasar de los 950 acogidos que tenía el lunes a los 878 contabilizados ayer.
Esta disminución del censo ha sido posible gracias a las salidas de varios grupos hacia la península para ser realojados en centros de acogida gestionados por ONG, o bien en Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) como paso previo a su repatriación.