LA SEXTA ola sigue su avance en Melilla y parece no tener freno. Este martes se comunicó la detección de 401 positivos de coronavirus, la cifra más alta registrada durante toda la crisis sanitaria.
Pero es que en solo 10 días de lo que llevamos de año, se han detectado en la ciudad más de 2.000 nuevos casos, así como también notificaron la curación de 870 personas.
Desde la Consejería de Salud Pública trabajan en la nueva orden de medidas sanitarias del coronavirus, que adelantan, endurecerán con el único objetivo de parar el avance de esta nueva oleada.
Para detener al virus se necesitan las normas pero también la colaboración de toda la ciudadanía haciendo uso correcto de la mascarilla, extremando las medidas de lavado constante de manos y la distancia interpersonal; pero también vacunándose contra el virus.
Melilla registra más de 2.000 casos activos y la presión asistencial la recibe, en estos momentos, Atención Primaria. Hasta ahora, el sistema sanitario ha resistido a la pandemia pero no se puede tensar la cuerda para evaluar su aguante.
El personal sanitario ha hecho frente durante casi dos años a la crisis del coronavirus. Han estado, como otros colectivos, en la primera línea atendiendo a quienes lo necesitaban.
Pero tras más de 500 días de lucha están cansados y necesitan que todos los melillenses colaboren en el cumplimiento de las normas sanitarias. Ya pasaron las festividades navideñas y es ahora cuando veremos el impacto provocado por las reuniones y encuentros familiares.
En casi dos años de pandemia se ha vivido mucho y aprendido de las experiencias. Pasamos meses confinados en casa, comenzamos a usar mascarillas, dejar de dar abrazos y besos a nuestros seres queridos, limitamos los viajes por un tiempo. No es momento de volver atrás, hay que luchar juntos contra un virus que nos ha cambiado la manera de vivir y de relacionarnos.
Atravesamos una sexta ola que parece no toca techo. La prevención, la cautela y la responsabilidad son claves para, entre todos, dejar esta pesadilla atrás.