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Es un hombre de 41 años y residente en Melilla, con antecedentes por delitos contra la salud
El detenido el jueves en el Rastro está acusado de supuestos delitos de abusos sexuales y corrupción de menores, de los que presuntamente han sido víctimas al menos cuatro chicos acogidos en un centro para menores extranjeros, según informó ayer la Comandancia de la Guardia Civil en una nota de prensa.
El detenido, de 41 años, natural de Melilla y residente en la ciudad, cuenta con antecedentes por delitos contra la salud pública relacionados con el tráfico de drogas y será puesto a disposición judicial como supuesto autor de conductas de abuso sexual, corrupción de menores y otros afines.
El Instituto Armado investigaba desde hace un mes a este hombre tras observar una vez que circulaba en un vehículo acompañado de un menor “con el que no mantenía vínculo alguno, aduciendo esa conexión al ofrecimiento para trasladarlo u otra análoga”, según la nota de la Guardia Civil.
La declaración de este menor ha permitido constatar que tanto él como otros tres chicos, acogidos en el centro melillense de La Purísima para menores varones extranjeros no acompañados, han sido víctimas supuestamente de abusos por parte de este hombre.
“Los abordaba y tras ofrecerles drogas y alcohol, lo cual presuntamente les anulaba o disminuía su capacidad volitiva, procedía a realizarles tocamientos y otros actos de contenido sexual”, según la Guardia Civil.
El hombre fue detenido ayer tras el registro de un local en una zona céntrica de la ciudad, donde presumiblemente llevaba a los menores para culminar los actos descritos, así como en dos vehículos de su propiedad, ha detallado la Comandancia.
El registro duró cerca de una hora y al margen de coincidir en los detalles con la identificación física del lugar por parte de las víctimas, se recogieron algunos vestigios de interés para la causa, al igual que en los vehículos.
La Guardia Civil no descarta que haya más víctimas, por lo que mantiene abierta la investigación
La Benemérita dio esta información tras el gran revuelo que se creó el jueves por la operación desplegada en el Rastro, donde fue detenido el hombre, tal y como publicó El Faro. Los agentes recogieron varias bolsas del interior de un inmueble situado en el número 10 de la calle Alféreces Díaz Otero. En ese momento la Benemérita no quiso dar más información sobre lo ocurrido porque aseguró que la operación estaba bajo secreto de sumario.
La actuación policial comenzó con el corte de la calle por parte de una patrulla de la Guardia Civil, mientras los agentes estaban en el interior del local recabando información. Uno de los guardias civiles salió del inmueble cargado de un gran número de bolsas sin que los presentes pudieran ver en ningún momento qué había en el interior. Además, en el dispositivo participaron varios perros.
Los vecinos de la zona no daban crédito a lo ocurrido y ninguno reconoció a la persona detenida. Uno de ellos explicó que el inmueble estaba alquilado, pero desconocía a qué se dedicaba.